El golazo en Goodison Park fue una liberación para Daniel Wass. Pressing alto, recuperación ante Sandro (control pifiado) y Coleman, conducción rápida -con finta para marear a Jagielka- hasta encontrar posición de disparo en el balcón del área grande y fogonazo imposible para Maarten Stekelenburg. El disparo sirvió el triunfo (2-3) y marcó un punto de inflexión en el camino del polifacético centrocampista. Hasta ese momento, el danés había ofrecido una versión funcional y pragmática. Lógico dentro del proceso de adaptación al equipo, a sus nuevos compañeros y al modelo de juego de Marcelino Con la dificultad añadida de competir en diferentes posiciones: derecha, izquierda, mediocentro y mediocentro de contención, como ocurrió en el Naranja. Las semanas de trabajo han reforzado su rol y la apuesta. Por trayectoria (tres temporadas en el Celta), por madurez (con 29 años) y por perfil, venía para dar rendimiento inmediato y parece en condiciones de brindarlo, empezando por el Atlético.

Everton y Bayer Leverkusen han servido para advertir una versión de Wass importante, realmente interesante por la estación y los pocos partidos que lleva. Mejor adaptado a la estructura y al engranaje, el danés estuvo entre los tres mejores futbolistas del Trofeo Naranja. Estuve implicado de forma directa en ocasiones claras de peligro y mezcló de maravilla con Santi Mina El 2-0 ante los alemanes llega después de un error forzado por la presión alta del Valencia; Wass interceptó el primer pase en la salida del Bayer y cedió al primer toque a Mina, que de inmediato puso en bandeja el gol a Rodrigo.

Las acción -como sucedió en Everton- pone en valor sus virtudes y los motivos que le han llevado a Valencia. En los ritmos altos, se maneja de maravilla. Colabora en la recuperación y busca el pase vertical de inmediato al equipo. El danés crecer en la combinación rápida, los partidos abiertos y el fútbol de transiciones. Sin medir dos metros, también es un jugador atlético, por despliegue y velocidad. Wass muerde en campo contrario, es un lanzador magnífico y también es un gran llegador. Lo ha demostrado en la fase caliente de la pretemporada.

Mezcla completa, mezcla ideal

Veinte asistencias y 14 goles en tres temporadas con el Celta. Los números refuerzan su especialidad: balón parado (golpeo), buen pie para disparar y centrar. Wass, Carlos Soler, Carlos SolerParejo, el recién fichado Cheryshev, incluso Kondogbia; el centro del campo tiene gol y tienen que sumar en esa dirección. Coquelin también hizo gol la temporada pasada -aunque puede tomarse como excepción- y con Guedes la segunda línea del Valencia CF se asentaría como una de las más potentes de LaLiga. La mezcla es completa por físico, técnica, juventud, experiencia y versatilidad. También por su perfil preciso, ideal para un estilo muy concreto.

Wass ha jugado por derecha, por dentro -con distintas funciones- y por izquierda, en los últimos partidos, aunque ante el Leverkusen tuvo minutos en el eje de la medular. La continuidad por banda izquierda le ha sentado bien, ha coincidido con su mejor versión. Es un comodín realmente valioso. La polivalencia se siente en la plantilla. Carlos Soler, Coquelin, Rúben Vezo

Alternativa sólida para la banda izquierda

Cheryshev rompe como recambio natural de Gonçalo Guedes.. si el portugués termina llegando, como se espera. El partido ante el Atlético llega demasiado pronto como para pensar que puede ser titular ante el Atlético, aunque Marcelino hizo saltar directamente al once a Coquelin y Kondogbia. Si bien, por las señales de los dos últimos partidos, la banda izquierda será para Daniel Wass. El equipo que dispuso de salida ante el Bayer Leverkusen tiene aroma de muy titular. El danés está ahí. Sin hacer ruido, una vez más, llega al comienzo de la temporada entre los doce o trece futbolistas que aspiran al once titular.

La competencia es tremenda en todas las posiciones. Nadie se puede dormir. Bendito problema para Marcelino. Wass hizo un golazo ante el Everton, pero seguro que Marcelino más satisfecho con su partido ante el Atlético. Ha jugador de todo, pero por los flancos ha estado mejor. No es un creador-organizador, pero sí tiene ritmo, buen pie y llegada.