Después de ocho largos años de dominio del Basilea, el Young Boys terminó con el ciclo azulgrana para celebrar -a lo grande- su duodécimo título de liga. No eran campeones desde 1986. La entidad de Berna, potencia a principios y a mediados del siglo pasado, parece dispuesta a abrir su tercera etapa de oro. La temporada pasada arrolló literamente y este curso ha abierto el campeonato con un pleno de victorias, cinco de cinco. Pese al éxito y al control que los clubes de Italia y -sobre todo- Alemania someten al balompié suizo, el Young Boys ha conseguido mantener a toda la columna vertebral de la plantilla para el gran reto de la Champions. Sólo han perdido al central Kasim Adams (Hoffenheim, ocho millones de euros). Más difícil de reponer parecía la marcha del entrenador Adi Hütter, arquitecto del gran salto durante las últimas tres temporadas. El técnico austriaco ha sido el elegido para tomar el relevo de Nico Kovac (ahora en el Bayern) en el Eintracht Frankfurt. Gerardo Seoane ha tomado el mando con acierto, dando continuidad a la base heredada. Mejor ataque, mejor defensa y siete puntos de diferencia ya con el Basilea.

El hispano-suizo Seoane (jugó en el filial de Depor) ha completado -el primer paso- la obra liquidando al Dinamo Zagreb en la previa. El Young Boys confió en Seoane después de su trayectoria en el Luzern, al que catapultó a Europa League con un tercer puesto brillante. Es uno de los técnicos emergentes en Suiza. Sacar los seis puntos en el doble duelo consecutivo, clave.

Con dos goles en la capital croata, Guillaume Hoarau ha sido el héroe de la clasificación. El francés (34 años), ex del PSG lleva siete goles en ocho partidos y la temporada pasada ya hizo 18, quince de ellos en la Superliga. Sólo le superó Albian Ajeti (Basilea/ Sankt Gallen). El Young Boys domina en Suiza, por físico, por ritmo, por velocidad y por su poder ofensivo. En Champions está obligado a reciclarse, pero sus puntos fuertes están claros. también los débiles. Obviamente, es el equipo inferior dentro del grupo, pero jugadores como Sékou Sanogo (Costa de Marfil), Djibril Sow o Mbabu llamarán la atención. Por encima de todo, los cuatro hombres que comandan el ataque del 4-4-2, Sulejmani, Hoarau, Ngamaleu (Camerún) y Fassnacht, más sus recambios: Nsame (Camerún) y Assalé (Costa de Marfil).