Todo lo que debes saber antes de instalar paneles fotovoltaicos en casa

En un mundo cada vez más comprometido con la sostenibilidad y la reducción de la huella de carbono, la energía solar emerge como una solución eficaz y esperanzadora. Las placas fotovoltaicas, capaces de transformar la luz del sol en electricidad, se han convertido en las protagonistas de esta transición hacia fuentes de energía más limpias y, además, suponen un gran ahorro en la factura de una luz que cada vez es más cara.

El poder del Sol: energía renovable en acción

Las placas fotovoltaicas, también conocidas como paneles solares, son dispositivos que convierten la luz solar en electricidad mediante el uso del efecto fotovoltaico. Compuestas mayormente de células solares hechas de silicio, estas placas absorben la luz solar y generan corriente eléctrica de manera directa, proporcionando una fuente de energía limpia y renovable.

¿Qué debes saber antes de tomar la decisión?

Una instalación de paneles fotovoltaicos requiere una cierta inversión económica. Es por ello que debemos tener en cuenta varios factores para determinar si podremos amortizar esta inversión en un tiempo razonable. Debemos tener en cuenta que, aproximadamente, una instalación de 4KW (lo que suele consumir una vivienda unifamiliar), que equivale a 8 paneles de 500W, oscilará entre los 6.000 y los 10.000€ dependiendo de si elegimos un inversor normal o híbrido, entre otras prestaciones.

La orientación del tejado

Aunque parezca evidente, lo más importante a tener en cuenta antes de realizar una instalación fotovoltaica es la orientación del tejado de la vivienda. Pese a ser verdad que cualquier orientación recibe rayos de sol en algún momento del día, debemos tener en cuenta que un tejado orientado hacia el norte recibirá menos luz durante el día y la mayor parte de la jornada la vivienda necesitará conectarse a la red eléctrica para abastecer su consumo y, por lo tanto, la amortización de la instalación será mucho más lenta.

Pedir varios presupuestos

También es importante pedir, como mínimo, tres presupuestos distintos. Hoy en día hay cientos de empresas que se dedican a la instalación de paneles fotovoltaicos y todas ellas ofrecen lo mismo: instalación de los paneles, gestionar toda la documentación para poder recibir ayudas y subvenciones y el mantenimiento durante el primer año, pero es importante preguntar qué marca de paneles nos van a instalar, ya que es posible que en una primera inversión no queramos o no podamos llenar todo el tejado de placas, pero es importante saber qué vale cada uno y qué calidad tiene para futuras inversiones.

El inversor

El inversor es el aparato que recoge la electricidad que generan los paneles, la integra en la red doméstica y vierte la que no necesitamos a la red eléctrica. Hay dos tipos de inversores, los normales y los híbridos. Los primeros no almacenan la energía sobrante, simplemente la vierten a la red eléctrica. Los híbridos se comportan igual que los normales, pero además permiten almacenar en baterías todo nuestro excedente para usarlo de noche o en días nublados.

¿Vale la pena invertir en baterías?

La diferencia entre una instalación con baterías y una sin baterías, puede oscilar entre los 2.000€ y los 3.000€. La ventaja es evidente: una batería almacena toda la energía que no hemos necesitado para usarla cuando no haya sol, pero mayor el coste inicial de la instalación, la vida útil de las baterías y la irrupción en el mercado de las baterías virtuales hacen que cada vez más personas opten por una instalación convencional sin baterías, pero eligen el inversor híbrido por si en algún momento deciden poner alguna batería.

Las baterías virtuales

Cuando una vivienda se pasa al autoconsumo, debe comunicarlo a la comercializadora (normalmente este paso lo hace la propia empresa que ha realizado la instalación) y cuando la comercializadora acepta el cambio, el cliente debe pedir a su empresa eléctrica el cambio a un plan de autoconsumo.

La diferencia entre un plan normal y uno de autoconsumo es que en el de autoconsumo, la empresa compra el excedente que generamos con nuestra instalación (siempre a un precio inferior al que el cliente se lo compra a la empresa) y eso es lo que permite abaratar la factura. Al final del mes se suman los KW que hemos necesitado de la red eléctrica y se restan los que la red eléctrica nos ha comprado a nosotros. 

Como es evidente que en los meses de verano generaremos más excedente que en los de otoño e invierno, hoy en día casi todas las comercializadoras han incorporado en sus planes de autoconsumo la opción de contratar una batería virtual. Estas baterías almacenan en euros el excedente que hemos generado con nuestra instalación para usarlo en aquellos meses con menos horas de luz y así compensar el coste de la factura.

Ayudas, desgravaciones y subvenciones

Para terminar, a la hora de calcular el tiempo que se tarda en amortizar la instalación deberemos tener en cuenta todas las ayudas, desgravaciones y subvenciones que hay alrededor de las energías renovables.

• Ayudas: En el caso de las viviendas, las ayudas europeas de los fondos Next Generation podrían cubrir hasta 600€ por kilovatio de potencia pico instalado (kWp) de los paneles y hasta 490€ por kWp de las baterías, si las hubiere.
• Subvenciones: En muchos ayuntamientos los vecinos que se pasan al autoconsumo pueden recibir un descuento de hasta el 50% en la tasa del IBI durante varios años.

Desgravaciones: Todo aquel que se pase al autoconsumo puede desgravarse en la renta una parte de la instalación siempre y cuando esta instalación implique una variación de letra en el certificado energético de la vivienda. Es muy importante tener en cuenta que es necesario presentar un certificado energético previo a la instalación y otro certificado tras la instalación para poder demostrar el salto de letra. Teniendo en cuenta todos estos aspectos, una instalación convencional de 4KW se puede amortizar en un periodo de entre 4 y 5 años.

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Contacto de la sección de Medio Ambiente: crisisclimatica@prensaiberica.es