No le demos más vueltas. Para el partido de esta noche las apuestas son definitorias y estas nos indican que casi en un porcentaje de espanto la victoria del Real Madrid se da prácticamente por segura. Ahora bien, el fútbol tiene esa magia que esconden muy pocos deportes y que lo convierten en algo distinto y seguido a lo bestia por mucha gente. Y esa sorpresa, eso inesperado, se puede dar esta noche y contra todo pronóstico el Valencia CF podría salir airoso de la ciudad deportiva del club merengón.
Un ejemplo claro
Hago cuentas así en mi cabeza y sé que mi pasión por el Valencia CF si pretende seguir metiendo el miedo en el cuerpo a un Barcelona que hasta la fecha se muestra superior. Ligeramente superior, pero superior al fin y al cabo. Y el ejemplo claro lo tenemos en un partido que se jugó hace ya bastante tiempo, un triunfo del Valencia en un partido memorable que jamás olvidaremos. Yo desde luego nunca. Me refiero a esa visita al Camp Nou y a ese resultado de 3-0 a favor de los blaugrana que de repente cambió.
Y salió el Valencia
En ese partido el Valencia CF perdía por goleada en casa del Barça, pero se produjo un milagro de esos imposibles en la vida real, de los que solo esconde el fútbol en sus entrañas para hacerlo todavía un poco más atractivo. El Valencia, así de golpe, empezó a marcarle goles al Barcelona cuando nadie lo esperaba y el cénit a todo esa locura llegó cuando Ariel Ortega materializó ese imposible 3-4 que marcaría el resultado final del partido. De un 3-0 a un 3-4 que nadie podía siquiera soñar en un visto y no visto.
Lo de esta noche
Y les voy a ser sincero, parece casi imposible que el Valencia pueda dar la sorpresa ante el Real Madrid, pero yo en el fútbol ya puedo decir que creo en casi todo. Es una misión complicada ganar en esa ciudad deportiva de Valdebebas, algo con lo que pocos cuentan en estos momentos, pero el fútbol es así de raro y caprichoso y es capaz de esconder una sorpresa tan gigantesca como la victoria del Valencia ante un Madrid que tampoco se puede permitir el lujo de conceder más ventaja al Barça en este sprint y apasionante final de LaLiga. Pero oigan, esto es fútbol. Raro por las circunstancias en que se juega, pero fútbol. Y el fútbol esconde mucha magia en su interior. Y sí, hoy podría ser un gran día... ojalá suceda algo parecido.
