Joseph Blatter vuelve a estar en el punto de mira. Y esta vez podría ser la definitiva para dejar su cargo como presidente de la FIFA. La semana pasada la oficina del Fiscal General suizo informaba de la apertura de una investigación criminal en la que Blatter está acusado de mala gestión y de malversación de fondos. Es la primera vez que las autoridades investigan la corrupción en el deporte más popular del mundo. Y señalan con el dedo directamente a Blatter, de 79 años, suizo y al frente de la institución los últimos 17 años. Este viernes algunos de los más importantes patrocinadores de la Copa del Mundo, entre ellos Coca-Cola, McDonald's, la propietaria de la cerveza Budweiser (Anheuser-Busch InBev) o Visa, lanzaban comunicados propios, pero en la misma línea: piden la cabeza de Blatter para que, dicen literalmente, “el proceso de reforma pueda proceder con la credibilidad que se necesita”.