¿Qué fue de Martín Palermo?

La llegada del astro argentino al Villarreal tras el ascenso del año 2000 supuso un cambio de rumbo en el conjunto groguet y la antesala de una de las mejores épocas del equipo. Palermo fue el primer gran fichaje de la dupla Fernando Roig - José Manuel Llaneza, consiguiendo que Martín recalara en un recién ascendido y no en colosos europeos como la Lazio, la Juventus o el Napoli.

El 12 de enero de 2001 el Villarreal anunciaba la llegada de Martín Palermo por 1.200 millones de las antiguas pesetas a cambio del 50% de sus derechos de traspaso, y lo hacía junto a otro argentino, Gustavo Barros Schelotto. El delantero, a sus 27 años, era una de las estrellas más cotizadas del mercado tras coronarse campeón de la Libertadores con Boca Juniors y tras su doblete ante el Real Madrid en la Intercontinental del año 2000.

Su fichaje por un club desconocido para el aficionado internacional, recién ascendido por segunda vez a la Primera División, dejó desconcertados a muchos. El propio Maradona mostró incredulidad:  "¿Palermo al Villarreal? ¡No me joda!... No lo digo faltando al respeto al Villarreal sino porque Martín Palermo, después de los dos goles que hizo al Real Madrid en la final de la Copa Intercontinental, se merece un club con historia o de alto nivel, como el Nápoles o uno que luche por lo más alto". 

A pesar de las expectativas creadas, el fichaje de Palermo por el Villarreal fue un fracaso. Al menos en lo deportivo. En dos temporadas y media en el conjunto castellonense el argentino anotó  sólo 18 goles. Posteriormente, Benito Floro lo descartó para la temporada 03/04 por su bajo nivel y recaló en el Betis. Tras media temporada en el conjunto verdiblanco, rescindió su contrato y fichó por el Deportivo Alavés…¡de Segunda División! Tras concluir la temporada, Palermo decidió volver a Argentina y a su Boca Juniors, donde terminó su carrera.

Aciaga noche en el Ciutat

Sin duda una grave lesión marcó su trayectoria en el conjunto groguet. Ocurrió ante el Levante, en el Ciutat de València, en un encuentro de Copa, de la forma más inesperada. Tras concluir el partido en empate, el partido se fue a la prórroga. A los ocho minutos, Palermo logró abrir el marcador y fue a celebrarlo con su afición. Y ocurrió la desgracia: el muro que separaba las gradas del terreno de juego se derrumbó por el amontonamiento de aficionados groguets, y cayó sobre la pierna del delantero, provocando una doble fractura de tibia y peroné, que lo alejó de los terrenos de juego seis meses.

Sobre la fatídica lesión, Martín Palermo comentó tiempo después: “Me costó muchísimo volver a recuperarme. Hasta la lesión, estaba bien en la adaptación y había empezado a hacer goles. La lesión me derrumbó bastante.”

Vuelta a donde fue feliz

Tras su discreto paso por Europa, Palermo volvió donde había sido feliz, a su Argentina natal y a Boca Juniors, donde es un ídolo. Allí se volvió a juntar con su mejor socio, otro exgroguet, Juan Román Riquelme, que sí pudo triunfar en el club castellonense; y juntos lograron ganar otra Copa Libertadores. 

El 12 de junio de 2011, Martín Palermo se despedía de la afición xeneize ante una Bombonera llena hasta la bandera, que dijo adiós a uno de sus grandes ídolos, con una despedida a la altura de lo que fue el delantero para Boca Juniors. 

Entrenador

Tras su retirada, Palermo ha hecho carrera como entrenador. Desde su primera experiencia en Godoy Cruz en la temporada 12/13, Martín ha pasado por seis clubes, y en los últimos días se ha hecho oficial su fichaje por Platense de Buenos Aires.