Ángel Trujilllo seguirá haciéndose más pruebas este martes. Tiene la retina dañada y es necesario someterlo a más controles, por lo que el club no emitirá un parte médico oficial hasta que el diagnóstico no sea más concreto. El central no volvió con el grueso de la expedición granota a la conclusión de la dolorosa derrota en el Coliseum Alfonso Pérez. El zaguero se trasladó al Hospital Moncloa de Madrid, junto a Miguel Ángel Buil, jefe de los servicios médicos de la entidad azulgrana, para someterse a distintas pruebas médicas con el fin de evaluar el alcance de la lesión que se produjo en el ojo derecho en un lance del enfrentamiento en su intento de atajar una aproximación del azulón Lafita. El futbolista complementó esta primera inspección con nuevos controles médicas ya en València, para consolidar el diagnóstico de esta dolencia. Un nuevo contratiempo más para una plantilla que se sujeta con alfileres por su confección y los problemas físicos que se han entrelazado en los dos últimos partidos
Lucas Alcaraz avanzó en rueda de prensa que el defensor madrileño "tenía un golpe en la retina que le dificultaba la visión". Lo cierto es que Trujillo fue relevado de sus funciones en el eje de la zaga en los minutos finales del primer acto tras sufrir el impacto de un fuerte golpe en la zona ocular en una acción fortuita y el técnico decidió modificar el sistema y apostar por el 4-4-2, pero con la misma nulidad ofensiva. El central regresó al campo tras un examen inicial por el galeno del club de Orriols, pero no pudo continuar sobre el verde. Trujillo y Miguel Ángel Buil regresaron de madrugada a casa.
