'The Last Dance', el documental de Netflix que ha devuelto a Michael Jordan a la actualidad, ha hecho que reaparezcan otros aspectos de la vida de la leyenda de la NBA, desde sus escándalos a su lujosa vida antes, durante y después de una exitosa carrera que concluyó en los Chicago Bulls.
Y uno de ellos es la enorme mansión que tiene a la venta y que no encuentra comprador pese a haber rebajado su precio a la mitad. Una venta que parece maldita, y que se inició cuando en 2012 colgó el cartel de 'Se Vende' por 30 millones de dólares. En la actualidad cuesta unos 14 millones de dólares. Eso sí, su coste para 'Air' es de 100.000 dólares en impuestos, una cantidad a la que debe hacer frente mientras no encuentre comprador.
El 'casoplón' tiene de todo, desde una cancha de baloncesto donde Jordan entrenaba, hasta un pequeño campo de golf y piscina, un estanque que la rodea por completo, y nueve dormitorios, 19 cuartos de baño, y una exclusiva sala de fumadores, entre otras excentricidades. Todo ello en los 28.000 metros cuadrados de parcela, de los que 5.000 metros cuadrados corresponden a la vivienda.
Se encuentra situada en el barrio de Highland Park, al norte de Chicago, y no tiene pérdida pues en la verja de acceso figura un 23 de más de casi dos metros de altura.
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