El Barça se lleva el duelo catalán contra el Girona Bàsquet y se afianza en el tercer puesto

Fontajau hizo sufrir al Barça en un partido que acabó ganando por 75-81 sobre el Bàsquet Girona, un derbi catalán que no se resolvió hasta el último cuarto y que tuvo en Jabari Parker (20) e Ike Iroegbu (25) los grandes protagonistas de la cita. Con este triunfo, los azulgranas se mantienen en la 3a plaza de Liga Endesa por detrás de Unicaja y Real Madrid.

La carta de presentación al partido la firmó Iroegbu con dos triples consecutivos que colocaban a los locales 6-0 por delante, toda una declaración de intenciones de un Bàsquet Girona que salía con todo a cortar la racha de tres derrotas consecutivas en Liga Endesa. Los azulgranas ajustaron en defensa y cerraron espacios en el exterior, con un Da Silva muy activo en ambos lados de la cancha y que se repartía los primeros puntos azulgranas de la tarde con Laprovittola y Kalinic, tres jugadores que castigaron desde la larga distancia.

Iroegbu no hace prisioneros

Grimau empezó a agitar el banquillo a falta de dos minutos , dándole minutos de calidad a Nnaji, que ocupaba el lugar en la rotación de Willy Hernangómez, baja en Fontajau. Dos triples consecutivos del Barça pusieron el broche de un primer cuarto (12-25) que finalizó con mucho acierto culé (6/9 en T3).

Sin demasiadas florituras, los de la capital catalana dominaban e imponían un ritmo físico que desesperaba al Girona en el ecuador del segundo periodo (17-30), un equipo que no conseguía enlazar posesiones de ataque exitosas y que era un 'flan' detrás. Ike Iroegbu, que acabó la primera parte como máximo anotador con 10 puntos y dos asistencias, 'bailaba' a Satoransky en el uno contra uno y era el único peligro real para los azulgranas en el encuentro. Se despistaron los de Grimau en el último minuto y permitieron un triple liberado de Juan Marcos y un mate de Pons que acercaron a los locales en la conclusión de la primera parte (31-37).

Jabari Parker 'se roba' el show

La segunda mitad arrancó como la primera, con un incontestable Iroegbu que anotaba cinco puntos prácticamente consecutivos y reducía las distancias en el luminoso con el 38-39. El público apretaba ante un Barça que se mostraba vulnerable por primera vez en toda la tarde y al que los tiros se le atragantaban. Apareció para salvar la papeleta Jabari Parker, que ante el bajón momentáneo de su equipo asumió la responsabilidad del ataque y anotó 6 puntos que fueron un bálsamo para los suyos (44-49).

El de Ilinois se erigía como el salvador del partido para Grimau, que veía como Ricky Rubio tenía que retirarse de la pista tras un aparatoso choque con Birch. Nnaji, incansable en los dos aros, exhibía su físico privilegiado con tapones y mates de fantasía y fue junto al exazulgrana Sergi Martínez, un puñal en el juego de transición, otro de los destacados de un tercer cuarto que se cerró por un ajustado 55-61 y en el que Parker había anotado 12 puntos.

Canastas de York, Djordjevic y Fjellerup firmaron un magistral inicio de último cuarto para Bàsquet Girona, que se colocaba a un punto (62-63) y olía sangre del Barça, que se mostraba indisciplinado con el balón en sus manos y cometía pérdidas imperdonables. Por supuesto, Iroegbu no desaprovechaba ninguna ocasión y seguía metiendo todo lo que lanzaba (69-70). Acciones de dos sospechosos habituales como Parker y Lapro a menos de dos minutos para el pitido final, este último con un 2+1 circense, sellaron la victoria azulgrana en Fontajau por 75-81.