¿Es bueno que la plataforma De Torino a Mestalla exista? Sin duda alguna. ¿Por qué? Porque es bueno para el valencianismo y también para el Valencia CF -más allá de su extensión como Sociedad Anónima y más allá de quién tenga su control desde el punto de vista mercantil- que haya alguien capaz de convertirse en una organización, persona o entidad en el que parte del valencianismo -no digo que todo- pueda sentirse representando puesto que ese papel no lo cumplen ni Meriton, ni el presidente del club Anil Murthy, ni el máximo accionista Peter Lim. Y no lo cumplen básicamente porque no les ha dado la gana cumplirlo. No sienten la necesidad de tener que representar a los aficionados. Digo esto porque las diferentes plataformas o colectivos que forman la plataforma De Torino a Mestalla, así como todas las personas que participan de su vida orgánica interna de manera individual, deben felicitarse estos días. Han superado el primer gran escollo cediendo cada uno parte de su interés o estrategia propia en favor del interés común de la plataforma. Lanzar un mensaje de unión entre ellos es indispensable para convencer. Un aplauso sincero. Que no acudan como plataforma a la Junta General de Accionistas del Valencia CF me parece raro pero no seré yo quién juzgue qué consideran ellos más efectivo para sus objetivos. Repito que me suena raro porque hasta hace unos días planificaban acudir pero no es más que mi opinión y no va más lejos. De hecho, esta es una de esas veces en que importa más la decisión final que el camino recorrido hasta llegar a ella. Importa más la decisión final porque demuestra que ya saben a qué se enfrentan y sobre todo, que han sido capaces de superarlo. Aunar diferentes sensibilidades bajo una misma marca no es fácil en absoluto y más si tenemos en cuenta que no estamos ante profesionales de la política, estamos ante valencianistas que quieren pelear por su equipo. Eso solo se puede aplaudir.

Después llegará el debate de hasta qué punto pueden ser efectivas sus estrategias o qué herramientas tienen para lograr que Peter LimPrimero porque fracasa el que no lo intenta y segundo porque en la medida en que sepan avanzar juntos, dejan un poso de sentimiento frente a Meriton que solo se estrella ante la realidad inamovible de la propiedad privada y el derecho mercantil, que son uno de los pilares de la sociedad en que vivimos. Como yo lo veo, la sola existencia de la plataforma De Mestalla a Torino significa un blindaje en sí mismo contra el fracaso y en la medida en que sepan entender que importa más lo que les uno que lo que les separa, 'se condenan' a ser un referente para el valencianismo... con o sin acciones. Mucha suerte y Amunt!

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