Bancos

Los españoles, obligados a pedir microcréditos para poder afrontar la subida de los precios y de los tipos de interés

“Este año ha habido un frenazo importante en los activos de los españoles. Lo que antes se pagaba con dinero ahorrado ahora se paga financiado”, explica el experto financiero de Banqmi Antonio Gallardo.

“Cuando el precio de la vida sube, a lo primero que afecta es a nuestra cuenta bancaria, que baja en parecida proporción".

“Cuando el precio de la vida sube, a lo primero que afecta es a nuestra cuenta bancaria, que baja en parecida proporción". / EFE

Noelia Pérez (Banqmi)

La inflación sigue sin controlarse y los tipos de interés han llegado ya al 4% tras la última subida aplicada por el Banco Central Europeo, lo que está disparando también los valores del euríbor, índice de referencia de las hipotecas variables. Estas son solo algunas de las causas que están haciendo que los españoles se vean cada vez más ahogados para llegar a final de mes y tengan que optar por vías alternativas como la petición de préstamos al consumo para poder afrontar pagos que antes podían sufragar con los ahorros disponibles en sus cuentas corrientes.

No obstante, en lo que va de año, tal y como explica Antonio Gallardo, experto del comparador financiero Banqmi, “ha habido un frenazo en los activos de los españoles, liderado claramente por la drástica caída del dinero en efectivo, que ha bajado hasta un -12% en el último año y ya venía de caídas del -4,30% en 2022 y del -3,60% en 2021”. Además, según datos recabados por el Banco de España, también desciende un -0,30% el dinero acumulado en los depósitos y, lo único que sube son las participaciones en fondos de inversión, un 2,90%.

“Cuando el precio de la vida sube, a lo primero que afecta es a nuestra cuenta bancaria, que baja en parecida proporción. Después el efecto se nota en los depósitos, de donde los españoles también tiran para cubrir consumo”, afirma el portavoz de Banqmi. No obstante, añade Gallardo, “en las participaciones en fondos de inversión lo que influye en sus movimientos es su valor: en 2022 no se comportaron muy bien y entonces bajaron un -7,6%, pero en 2023 ya están ofreciendo mayor rentabilidad a quienes optan por este método de inversión”.

Los préstamos al consumo de hasta un año suben un 7,7%

Pese a que el Banco de España también muestra que el saldo vivo de los créditos al consumo se ha reducido en la última década un -4,6%, (de los 186.655 millones que aglutinaban en 2023 a los 178.027 millones de abril de 2023), esta caída está impulsada por el desplome de los préstamos al consumo a largo plazo, los que duran más de cinco años. Concretamente, el saldo vivo en este tipo de préstamos, que podrían estar destinados por ejemplo a sufragar reformas en la vivienda, se ha reducido hasta un -18% durante la última década: de los 130.086 millones de euros de 2012 han pasado a los 106.557 millones en abril de 2023.

Sin embargo, el resto de los préstamos han experimentado, durante el mismo periodo, subidas bastante elevadas: del 36,8% en los préstamos al consumo de entre uno y cinco años y del 16,8% en los préstamos de hasta un año. Y son estos últimos los que más han crecido en el último año: han subido un 7,7% desde abril de 2022 (cuando su saldo vivo era de 32.174 millones de euros) hasta abril de 2023 (34.636 millones de euros), según el Banco de España.

“Los préstamos al consumo de hasta un año, o microcréditos, suelen están destinados a ganar liquidez o hacer compras a corto plazo, es decir, a cubrir la subida de precios”, asegura Antonio Gallardo. Este experto financiero también destaca que “los que tienen una duración de entre uno y cinco años se dispararon entre 2014 y 2019, lo que hace que suban tanto a nivel general, pero a partir de la llegada de la pandemia del coronavirus en 2020 no han hecho más que disminuir”. Entre los motivos, dice Gallardo, podría estar sobre todo “la caída de la compra de vehículos por sus elevados precios y por la aparición de nuevas formas de compra como el renting”.

La subida de las hipotecas aumenta el riesgo de endeudamiento

Dejando a un lado los préstamos al consumo, la mayor bajada en la última década la han experimentado los saldos vivos en hipotecas. En abril de 2023 había en España un saldo vivo en préstamos sobre viviendas de 504.355 millones de euros, un -19,75% menos que los 628.444 millones de 2012.

El experto del comparador financiero alega que esta caída "seguramente esté relacionada tanto con la subida del precio de la vivienda como con la subida del euríbor y de los tipos de interés, que ya están al 4%, porque esto hace que los españoles tengan que destinar más parte de su sueldo a pagar su hipoteca, lo que también aumenta su riesgo de endeudamiento: si no tienen ahorros no pueden pagar otros gastos y es cuando tienen que pedir microcréditos”.