El impresionante rincón de Valencia que cada vez se parece más a Tokio

Se acerca el verano y es el momento de elegir dónde ir de vacaciones. A todos nos gustan los destinos lejanos, exóticos y paradisiacos, pero lamentablemente no están al alcance de cualquier bolsillo. Y más con la delicada situación económica actual. Sin embargo, siempre hay alternativas low cost.

Algunos turistas prefieren las grandes ciudades, otros la naturaleza y también los hay que lo que buscan es vivir experiencias. Sin embargo, siempre hay destinos de vacaciones muy glamurosos que generalmente son caros... como es el caso de Tokio. Para visitarlo hay que hacer un viaje de muchos kilómetros hasta Japón con un alto coste económico y también un tiempo largo de desplazamiento.

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La masificación de Tokio llega a Valencia

En este caso no traemos una comparación positiva y una negativa. No aparece en los rankings de masificación turística porque se miden en turistas por habitantes y es la más poblada del mundo, pero sin duda Tokio es el mayor ejemplo de masificación sumando locales y visitantes. Si contamos solo a los primeros hay que señalar otras ciudades asiáticas en India, Pakistán o Bangladés y si nos quedamos con los segundos, la clasificación la lidera Dubrovnik (que sí tiene una imitadora en Valencia en el sentido positivo).

Volviendo a la capital de Japón, hay un rincón de Valencia que le hace la competencia. No hablamos de las Fallas ni de ningún acontecimiento especial, sino de los tan polémicos pisos turísticos. Y es que no solamente los hay en la ciudad, sino que también se están instaurando en la periferia... e incluso en los bajos.

Nou Benicalap, en el punto de mira

El barrio que está ahora en el punto de mira es Nou Benicalap. Este sector del norte de Valencia no ha evolucionado como se esperaba al urbanizarlo y muchos de los propietarios de los bajos en teoría comerciales están alquilándolos como apartamentos para turistas ante la ausencia de establecimientos. Un lugar poco acogedor a oscuras y en la periferia pero que sirve a unos cuantos visitantes para dormir durante su estancia en la ciudad.

Los vecinos llevan un tiempo lamentando la situación del barrio, que empieza a imitar lo malo de la capital japonesa. También hay algo de lo bueno en Valencia, pero en el centro de la ciudad y con escasas similitudes (para bien) con la megápolis asiática. Otro rasgo de Tokio que nunca va a reproducirse en España, por cierto, es lo de ser sede olímpica por segunda vez. Y lo de construir estadios, veremos...