Las dos semanas que lleva ya el país en estado de cuarentena han servido para ver la faceta más solidaria de Carlos Bacca. El colombiano y el Villarreal, con el apoyo de los integrantes de toda la plantilla, han activado recientemente un plan de ayuda para dar de comer a 200 personas al día en el comedor social de la Asociación Cáritas de Vila-real y así paliar los efectos que está generando el COVID-19.

Con sede en Puerto Colombia, lugar donde nació el punta amarillo, la Fundación Carlos Bacca fue fundada en 2013, pero desde 2010, con la ayuda de su mujer, trabajan con la finalidad de asistir a las personas más necesitadas. Comenzaron a cooperar con la gente de su barrio y actualmente coordinan, además, el CD Carlos Bacca, una escuela de 60 niños en la que aprenden la práctica futbolística y se nutren de crecimiento personal. La hermandad del '9' no tiene ningún tipo de limitación, tampoco en La Plana Baixa.

"Tenemos la posibilidad de ayudar y queremos hacerlo. Tenderle la mano a la gente de nuestro entorno más cercano. Nos llena de satisfacción poder ayudar a las personas de Vila-real que más lo necesitan, gracias a esta iniciativa del club, de mis compañeros y de la Fundación Carlos Bacca. Desde la fundación, siempre queremos ayudar y estamos abiertos a hacerlo sea cual sea la situación", dijo el ariete en una entrevista con el club.

Además de enfocar sus esfuerzos en Cáritas, también destina los alimentos a todos los colectivos que vuelcan su dedicación en que el coronavirus desaparezca de nuestra sociedad. Todos ellos son cocinados en las instalaciones del estadio de La Cerámica y los servicios de restauración groguets son los encargados de proporcionar las comidas a sus distintos puntos de interés. Siendo los beneficiados, por ejemplo, médicos, enfermeros o policías.

"Se prepararán 200 comidas diariamente en el Estadio de la Cerámica para que Cáritas Vila-real pueda repartirlas a las personas que lo necesiten y, además, el club pondrá sus servicios de restauración gratuitamente a disposición de colectivos como médicos, enfermeros o policías, que están luchando sin descanso contra esta pandemia", aseguró meditante las declaraciones facilitadas por el Villarreal.

En un escenario donde la responsabilidad de todos los habitantes de España es determinante para vencer al COVID-19, el exfutbolista del Sevilla no dudó en animar, a todo el mundo, a cumplir con las recomendaciones procedentes desde el gobierno y las autoridades sanitarias. Además, lanzó un mensaje de ánimo, unidad y esperanza, consciente de que saldremos de esta circunstancia excepcional con un plus de fortaleza.

"Quiero mandar un saludo muy especial a toda España. Debemos seguir tomando precauciones y dejar trabajar a los profesionales sanitarios. Así, les ayudaremos de la mejor manera posible. Lavándonos las manos, no salir de nuestras casas sin haber ninguna necesidad y esperar que todo pase para que se vuelva a la normalidad. Con mucha fe, saldremos de esta situación y lo haremos más fuertes que nunca", cerró su comparecencia el cafetero, que tuvo como finalidad dar visibilidad a lo que se dedica fuera del mundo del balompié. Una muestra de solidaridad, fraternidad y bondad que adquiere un valor adicional al plasmarlo igualmente en el estado de alarma nacional.