Las goleadas en el fútbol base han sido noticia en las últimas semanas. Por un lado están los que creen que los pequeños deben preparse para el mundo competitivo y por otro, los que consideran cruel ver marcadores abultados y piensan que pueden hacer mucho daño a los más que las reciben.

Zinedine Zidane se ha mojado, sorprendentemente, al respecto tras el viral Villaverde 0-31 Real Madrid de benjamines. "Es una cosa un poco fea", ha dicho el técnico, que a su vez ha agobado para que existan normas federativas para evitar situaciones así.

Cuestionado en la rueda de prensa previa sobre un resultado que este fin de semana llamó la atención en muchos medios de comunicación, el técnico francés ofreció una postura clara:

"El entrenador no dice a los jugadores lo que tiene que hacer. Juegan y lamentablemente puede pasar eso, es una cosa un poco fea encajar 31 goles. No compete al entrenador decir a los jugadores que no tienen que atacar más. Es más cosa de la Federación. En el baloncesto, creo que después de 50 puntos, se para el partido. Hay que ver por ahí", concretó.