El Villarreal revalida su título con dos latigazos ante el Levante (2-1)

Fatou Kanteh y Raquel Morcillo firmaron dos de los mejores goles del torneo para superar a un combativo Levante UD que no bajó los brazos

Imagen de la final femenina del COTIF entre Villarreal y Levante

Imagen de la final femenina del COTIF entre Villarreal y Levante / CESAR MARCH

T. Cerdá

E l Villarreal consiguió su segundo COTIF Femenino Cañamás Naranja consecutivo. Un logro del que muy pocos equipos pueden presumir. Las de la Plana aprovecharon dos latigazos de Fatou Kanteh y de Raquel Morcillo -en el inicio de cada parte- para superar por 2-1 al Levante UD, que, pese a militar dos categorías por debajo de las amarillas, mostró un excelente nivel competitivo y puso en aprietos a las de Sara Monforte hasta los minutos finales. 

El partido comenzó con sorpresa. Y esa sorpresa fue un golazo. Fatou Kanteh se inventó un latigazo inapelable desde fuera del área, que quitó todas las telarañas de la escuadra derecha de la portería defendida por Ángela Moral. Era solo el segundo 40 y el equipo ‘groguet’ ya mandaba en la final. En los minutos siguientes, el partido tomó color amarillo, no solo en el control de la posesión, sino también en la sensación de peligro que el equipo dirigido por Sara Monforte imprimía sobre la portería ‘granota’. 

Aunque, en una final, no hay nada escrito. El primer aviso blaugrana llegó desde las botas de Carlota Ursúa, una de las más activas del partido, tras rematar bombeado un centro desde el perfil izquierdo de Carol Herrera, que obligó a Carmen Carbonell a emplearse a fondo para evitar el empate. Los primeros minutos aglutinaron todo el ritmo de partido que le faltó a la final de consolación. 

El partido enloqueció y las ocasiones se sucedían. Un pase al espacio del centro del campo del Levante puso a Aixa Salvador -canterana del Villarreal- frente a la portería ‘grogueta’. Carmen Carbonell se hizo muy grande y como si se tratase de una portera de balonmano, sacó el balón con los pies. Prácticamente lo mismo sucedió en la jugada siguiente, en el otro extremo del campo. Esta vez fue María Llompart quien no atinó a definir un mano a mano contra la guardameta Ángela Moral. 

Cuando ya agonizaba la primera parte, una internada por la banda derecha de Carol Herrera -en cuyo inicio las jugadoras del Villarreal pidieron manos- acabó con un centro que se paseó por el área y cayó en botas de Marina Soriano, que aprovechó para fusilar la meta de Carbonell. El partido se fue al descanso como comenzó: con empate en el marcador y todo por decidir en una segunda parte que prometía ser de altos vuelos.

La segunda mitad empezó con el mismo guion que la primera; es decir, con golazo del Villarreal CF. Raquel Morcillo, tras jugada personal y desde una distancia de 25 metros a portería, se sacó un zurdazo por toda la escuadra. Se volvía a poner por delante el submarino. Y, ahora sí, con la experiencia de lo vivido en la primera mitad, Sara Monforte alentaba a las suyas a ampliar la ventaja si no querían sufrir en el tramo final. 

El Levante quemaba todas sus armas para intentar rascar el empate, pero el sistema defensivo del Villarreal aguantó firme y sin ningún resquicio por donde generar peligro. Y, aunque las delanteras ganan partidos, las defensas ganan campeonatos. Con un bloque así, poco más pudo hacer el Levante. Al final de los 70 minutos reglamentarios, el Villarreal consiguió mantener el 2-1 y coronarse, por segunda vez en su historia, como equipo campeón del COTIF Femenino Cañamás Naranja.