Di María: “Cuando recibí la carta del Real Madrid la rompí antes de abrirla"

Un emblema de la Selección Argentina explicó las presiones que recibió por parte del Real Madrid para no jugar la final en el Mundial de Brasil.

Di María llorando tras perder la final del mundo en 2014

Di María llorando tras perder la final del mundo en 2014 / TyC Sports

La Selección Argentina se coronó como la campeona del mundo en el mundial de Qatar 2022 y tras el gran desempeño del rosarino, The Players Tribune publicó una conmovedora carta escrita por Ángel Di María en la que, entre otras cuestiones, cuenta en detalle su ausencia en la final de Brasil 2014.

Así lo cuenta Di María

Di María en rueda de prensa

Di María en rueda de prensa / TyC Sports

Todo sucedió en la mañana de la final del Mundial 2014, exactamente a las 11. Yo estaba sentado en la camilla a punto de recibir una infiltración en la pierna. Me había desgarrado el muslo en los cuartos de final, pero con la ayuda de los antiinflamatorios ya podía correr sin sentir nada. Les dije a los preparadores estas palabras textuales: ‘Si me rompo, déjenme que me siga rompiendo. No me importa. Solo quiero estar para jugar’.

Y ahí estaba, poniéndome hielo en la pierna, cuando el médico Daniel Martínez entró al cuarto con un sobre en la mano y me dijo: ‘Ángel, mira, este papel viene del Real Madrid’. ‘¿Cómo? ¿Qué me estás diciendo?’, le dije.

Me contestó: ‘Bueno, ellos dicen que no estás en condiciones de jugar. Y nos están forzando a que no te dejemos jugar hoy’.

Inmediatamente, comprendí lo que estaba pasando. Todos habían escuchado los rumores de que el Real quería comprar a James Rodríguez después del Mundial, y yo sabía que me querían vender para hacerle lugar a él. Así que no querían que su jugador se rompiera antes de venderlo. Era así de sencillo. Ese es el negocio del fútbol que la gente no siempre ve.

Le pedí a Daniel que me diera la carta. Ni siquiera la abrí. Solamente la rompí en pedacitos y le dije: ‘Tírala. El único que decide acá, soy yo’.

Sinceramente, quería jugar ese día, incluso si se terminaba mi carrera. Pero tampoco quería hacerle las cosas más difíciles al equipo. Así que me desperté muy temprano y fui a ver a Alejandro Sabella (El seleccionador argentino en aquel momento). Teníamos una relación muy cercana, y si le llegaba a decir que quería jugar, seguramente él iba a sentir la presión de ponerme. Así que le dije honestamente, con una mano en el corazón, que él debía poner al jugador que él sintiera que tenía que poner.

"Si soy yo, soy yo. Si es otro, entonces será otro. Yo solo quiero ganar la Copa. Si me llamas, voy a jugar hasta que me rompa’, le dije. Y entonces comencé a llorar”.

Su revancha en Lusail

Di María celebrando el gol contra Francia

Di María celebrando el gol contra Francia / El Gráfico web

Di María aparece siempre. A sus 34 años dio una exhibición con garra y determinación. Sacó todo su manual de jugador desequilibrante para hacer una actuación a la altura de muy pocos. Con un protagonismo persistente, asociándose con Leo Messi y con todos sus compañeros que aprovecharon que estaba con ansia de revancha.

Todo cambió cuando llegó el llanto de Di María, después de hacer el 2-0. Un golazo con una contra letal de Argentina, con Messi y un pase final de Mac Allister para la definición sublime del rosarino, que superó por encima a Lloris. Después de ese gol, Ángel rompió a llorar de emoción. Unas lágrimas que esta vez serían de alegría porque puso a la albiceleste con ventaja. A los 64 minutos fue cambiado totalmente exhausto por el esfuerzo y felicitado por todos sus compañeros por su gran partido. El resultado final ya todos lo conocemos.