El destino ha querido que antes de un acontecimiento como el Centenario tengamos un partido en Mestalla tan poco estético como este frente al Getafe, feo a priori pero que sin embargo reúne un montón de ingredientes que lo hacen atractivo. Basta recordar cómo acabó el último partido frente al equipo madrileño, del que se recuerda especialmente la bronca, aunque nunca se hubiera producido si antes no hubiera marcado Rodrigo dos goles en el tiempo de descuento que le dieron la vuelta a la eliminatoria. Ni en los medios de la capital le habrían puesto un micrófono a Ángel Torres para realizar aquellas impresentables declaraciones que hizo. Ha declinado el presidente del Getafe la invitación del Ha declinado el presidente del Getafe la invitaciónValencia CF, invitación protocolaria y por una simple cuestión de educación, porque a este señor no le deberían dejar que pisara Mestalla.

En cualquier caso, Torres no juega y sus palabras lo único que habrán conseguido es calentar los ánimos de la afición valencianista y de los propios jugadores, algo que aquel día ya resultó determinante para la locura que vivimos en el desenlace del partido. Más allá de la clasificación, ellos solitos han convertido al equipo azulón, que era uno más, en un enemigo a batir, en un objetivo común. Como la otra vez vienen con marcador a favor porque llevan seis puntos más y el empate les vale, pero ojo que el Valencia CF llega muy obligado a ganar y quiere esta victoria.

Más opiniones de Julián Montoro.