Pablo Martínez ya ve el final del túnel

El centrocampista, que afronta la recta final de su recuperación, empezó a trabajar ayer con el grupo de forma parcial y ya está cerca de reaparecer tras su grave lesión de ligamentosEl centrocampista, que afronta la recta final de su recuperación, empezó a trabajar ayer con el grupo de forma parcial y ya está cerca de reaparecer tras su grave lesión de ligamentos

Pablo Martínez, en Buñol

Pablo Martínez, en Buñol

El fin del túnel ya está muy cerca para Pablo Martínez. El centrocampista granota, lesionado del ligamento cruzado anterior y operado hace cinco meses y medio, se incorporó este lunes de manera parcial al trabajo de grupo del Levante. Su ausencia fue muy acusada por el equipo en la recta final del campeonato y se le espera con los brazos abiertos para ser uno más en esta temporada en Segunda.

Durante este tiempo la recuperación del madrileño ha cumplido todos los plazos e incluso desde el club se le ha tenido que frenar por las ganas que tenía de acelerar su regreso para estar de nuevo con sus compañeros sobre el verde. El dorsal '10' que había quedado huérfano por la salida de Vicente Iborra ya le espera para reaparecer dentro de pocas semanas vestido de corto en el Ciutat de València. Recuperar el nivel que estaba dando antes de la lesión no será fácil, pero tendrá mucho que aportar desde el primer día a un grupo que ya ha limpiado la mente de la catástrofe contra el Alavés y ha empezado con fuerza este nuevo intento de asalto a la élite. Siete puntos de nueve a la espera de empezar a contar con una de las piezas más valiosas.

Pablo todavía tiene tres temporadas de contrato por delante. Un mes antes de romperse firmó una merecida renovación hasta 2026 que le situó como valor de presente y de futuro en Orriols. Se hizo hueco desde el filial y tuvo que picar piedra en sus cesiones al Mirandés y el Huesca hasta que se convirtió en uno de los futbolistas más destacados de toda la Segunda División. Ahora tiene ganas de redimirse y completar el objetivo que se le quedó a medias en aquel fatídico partido contra el Albacete.

Este tramo final, ya rodeado de sus compañeros, será la parte más llevadera de la recuperación. Tras completar parte de la sesión con el grupo irá elevando la intensidad del trabajo hasta que esté completamente preparado para reaparecer en las convocatorias de Javi Calleja. El entrenador y la afición esperan con ganas al regreso. También los otros centrocampistas, que están dejándole el listón alto con las buenas actuaciones de Oriol Rey o el estreno goleador de Giorgi.

Rober Ibáñez también

La buena noticia fue doble, ya que el valenciano también se reincorporó parcialmente. Su debut en la temorada fue muy accidentado, ya que sufrió una contusión en el hombro izquierdo nada más ingresar en el partido contra el Amorebieta y tuvo que ser sustituido a los veinte minutos. No pudo participar ante el Burgos y el Cartagena pero ya está dejando atrás las molestias en vistas a reaparecer lo más pronto posible.

En una plantilla que tiene perfiles muy variados el rol de extremo más puro que aporta Rober Ibáñez puede ser muy valioso para desatascar partidos. No en vano, la temporada pasada tuvo unos números meritorios para la cifra disputada de minutos. Él sí vivio el partido del no ascenso y espera contribuir a que el desenlace sea bien distinto esta vez.