Fabrício vuelve a ver las dos caras de la moneda

El delantero brasileño anotó su cuarto tanto del curso a base de velocidad y potencia, pero como le pasase ante el Albacete y Racing de Ferrol, le costó una nueva lesión muscular fruto de la explosividad

Tras las pruebas realizadas un día después del partido, el '12' estará ocho semanas de baja

Fabrício anotó su cuarto gol de la temporada

Fabrício anotó su cuarto gol de la temporada / LALIGA

Manel J. Ghelli

Manel J. Ghelli

El Levante rascó un punto de la Romareda tras ponerse 2-0 abajo en cuestión de minutos. Sin embargo, apareció la velocidad de Fabrício para arrojar un rayo de esperanza y poner la primera piedra de una remontada que no llegó a consumarse, pero terminó en un valioso empate. El gol supuso una inyección de moral para el equipo, que minutos más tarde consiguió poner la igualada en el electrónico. Una nueva carrera imparable del brasileño, que recuerda a la que consumó ante el Albacete, aunque desgraciadamente no se emuló tan solo el tanto. El ‘12’ se rompió en la arrancada y, tal y como han reflejaron las pruebas que le realizaron el jueves, estará ocho semanas de baja. Un nuevo contratiempo para el Levante, que no termina de vaciar la enfermería. 

El caso de Fabrício es curioso, ya que no es la primera vez que ha caído lesionado anotando un gol. Ante el Albacete vivió una situación similar, con una carrera imparable para los rivales, en la que una vez anotado el tanto se llevó la mano a la parte posterior de la pierna para dolerse. En esta ocasión, el pinchazo lo notó incluso antes de iniciar la galopada, en la misma arrancada. El propio Calleja lo confirmó en la rueda de prensa posterior.

«En la primera parte no se encontraba a gusto y parecía que tenía cansancio del otro día. En la segunda se ha abierto en banda derecha y ha desbordado más. Ha tenido el acierto del gol pero, después de tener una carrera como ha tenido, él me dice que nota incluso antes el pinchazo, cuando arranca. En vez de tirarse prefiere continuar para ayudar al equipo», una demostración de compromiso que sirvió de ejemplo a sus compañeros, que siguieron remando por él hasta conseguir el empate. El Levante volverá al trabajo el 28 de diciembre, pensando ya en el duelo ante el Albacete el 13 de enero.