Casi que Mendilibar se puede ir olvidando de Pape Diop otra jornada más, al menos a la hora de confeccionar la alineación titular. Es imposible que el medio centro afronte la visita sabatina a La Rosaleda en las mejores condiciones, como consecuencia del tute que se está dando con su selección: regresará a València el viernes por la tarde, después de acumular 17 horas de vuelo en apenas día y medio. El ‘23’ granota, por tanto, ni siquiera estará de vuelta cuando el técnico elabore la convocatoria para el choque ante el Málaga.
A nivel psicológico, el de Zaldibar destacaba la semana pasada el balsámico efecto que iba a tener la citación de Senegal para el futbolista, que justo antes de la misma había apurado sus opciones de irse a Olympiacos. A nivel físico, sin embargo, la experiencia a suponer un evidente lastre a corto plazo para el centrocampista. «Espero que venga bien; sino, a darle tiempo, que tampoco pasa nada», avanzaba el vasco después del amistoso en Almansa, sin dar más detalles.
Su presencia en Botsuana, donde mañana a las 19:00 (hora española y local), donde su combinado nacional afronta el segundo choque clasificatorio para la Copa de África 2015, obliga a Pape a realizar un evidente sobreesfuerzo para llegar a Orriols lo antes posible. Deberá volar 11.600 kilómetros, con dos escalas de por medio (pasará por su país y por París), lo que prácticamente le dejará sin tiempo para descansar. Ayer, además, se metió otras ocho horas largas y 6.500 kilómetros de avión, en el trayecto de ida desde Dakar a Gaborone, capital de la meridional nación africana. Incluso la federación senegalesa se ha visto afectada por tamaña odisea, ya que ha tenido fletar sendos vuelos especiales ante la ausencia de combinaciones aéreas entre ambas ciudades.
Ausente en el estreno liguero ante el Villarreal por sanción, y frente al Athletic por las negociaciones entonces abiertas para su traspaso al campeón griego (fallidas por tercera oportunidad), Diop va a ser víctima evidente del 'virus FIFA'. Y, además, puede que no obtenga nada a cambio. Su seleccionador, el francés Alain Giresse, prepara un once sin el levantinista, que ya se quedó inédito en la victoria del sábado frente a Egipto.
Ante su evidente ascendencia de en el vestuario y en el juego, Mendilibar podría verse tentado a forzar a Pape en la búsqueda de los primeros puntos en Málaga, aunque todo apunta a que permitirá su completa recuperación con vistas al exigente calendario posterior: en una semana visitarán el Barça y el Rayo el Ciutat, con el choque ante el Granada de Caparrós por medio.
Simao, para la última sesión
Más corto y cómodo (aunque le esperan 9.000 kilómetros y casi un día entero) será el trayecto de vuelta del mozambiqueño tras jugar con su selección también mañana ante Níger a las 17:00. Simao volará inmediatamente después, por lo que salvo imprevisto estará en la última sesión previa a la tercera jornada liguera, fijada para el viernes por la mañana en la ciudad deportiva. Vyntra y El Adoua, que tuvieron compromisos con sus respectivas selecciones el pasado fin de semana, se reintegrarán al grupo en las próximas horas y no deben tener problemas para jugar en Málaga.
