Las imágenes de Campaña marchándose del terreno de juego cabreado, agarrándose la camiseta y con la mirada perdida fueron el reflejo de lo que sintió la afición tras el encuentro. Su impotencia fue la de todo un equipo que ahora ve aumentar la presión con tres partidos clave por delante. La Real Sociedad es el próximo objetivo y ahí, en el Reale Arena, el centrocampista andaluz necesita dar su mejor versión para aportar salida de balón. No será fácil teniendo en cuenta el nivel del rival, en Europa y con un Odegaard en estado de gracia, pero la derrota contra el Espanyol ha dejado al Levante sin margen de error antes del próximo parón.

El '24' no tuvo su mejor día contra el cuadro perico y la falta de socios no le ayudó. Como primer apoyo, Radoja, le facilitó las cosas, pero a partir de ahí entran los problemas. Rochina estaba demasiado lejos, Clerc, en su perfil izquierdo, no tuvo su día y Morales-Hernani no son jugadores de perfil asociativo. Por ello, cuando la vía del contraataque falla, en distribución en ataque estático el equipo no se encontró ni mucho menos cómodo. Paco López de hecho definió el partido de "raro", pero el problema precisamente es que se vio desde el primer minuto que las sensaciones de juego no eran buenas y Campaña nunca encontró socios para dirigir la orquesta. Tampoco con los cambios.

Los cambios de Paco López fueron dos delanteros (Sergio León y Mayoral) y finalmente el de Miramón, un hecho anecdótico ya que prácticamente no quedaba tiempo. Valorando eso, Melero o Bardhi se habrían convertido tal vez en mejor opción para el juego granota, escaso en el centro del campo y sin generar ocasiones. Es decir, Roger no disfrutó de más ocasiones arriba por un déficit de de juego, no por ser él un problema contra el Espanyol. Por eso, y viendo el rendimiento de Campaña, proteger al '24' contra el conjunto perico añadiendo más medios sobre el terreno de juego habría provocado, casi con total seguridad, más segundos de posesión a favor. Y a partir del balón, la posibilidad de hacer daño a un Espanyol que ni tan siquiera sufrió en el Ciutat de València.

Próximo viaje al Reale Arena

De fondo aparece el duelo contra la Real Sociedad y los últimos visitantes del feudo donostiarra marcan la hoja de ruta de lo que se debe o no hacer. El Betis salió sin intensidad ni centro del campo. Con Javi García como único acompañante de Canales en el medio más cuatro jugadores de carácter ofensivo, todo fue un caos. Fekir, Joaquín, Borja Iglesias y Loren Morón. Y aunque se adelantaron en el marcador, el baño realista dejó en cueros al equipo de Rubi, que no está actualmente en descenso. Por su parte, la victoria del Getafe se gestó desde la batalla y la intensidad. El pelear cada balón y segunda jugada. Con un fantástico Cucurella, un genial Mata y la aparición desde el banquillo de Kenedy. En definitiva, desde la valentía.