El capitán no permitirá que el Valencia se caiga

Recuerdo a aquel niño de 17 años que acababa de debutar en Llagostera. Aquella noche tuve la suerte de hablar con Gayà en el aeropuerto de Girona de vuelta casa. Estaba eufórico por el debut, agradecido a Guaita y Víctor Ruiz porque le habían ayudado mucho, impresionado porque todos le habían tratado «como uno más» y sorprendido porque llegó... ¡casi a 500 seguidores en Twitter! Ahora tiene casi cien mil.

Lo que más me llamó la atención de aquella lluviosa noche, más allá de su desparpajo en el campo, fue que se enteró por la mañana por boca de Pellegrino que jugaba y no llamó a sus padres en todo el día para decírselo. José se olvidó de todo, se metió en el partido y pensó 100% en el Valencia. Han pasado diez años y aquel niño, ahora convertido en capitán y leyenda, sigue siendo igual. La pérdida de nivel competitivo por la gestión de Meriton es notoria, pero el capitán tiene los cinco sentidos en el Valencia. Vive por y para el equipo. Gayà nunca permitirá que se caiga.

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