Puchol II y Héctor se proclamaron ayer campeones de la Lliga Oxford tras superar en la final, celebrada en Guadassuar, a Fageca y Héctor por un ajustado 60-50. El encuentro, que rozó las dos horas de duración, ofreció emoción y golpes maestros, propios del más alto nivel de la escala i corda profesional. La calidad mostrada por los cuatro pilotaris permite soñar con que hay recambio para las grandes figuras de la actualidad.

Además de jugadas magistrales, el choque tuvo emoción hasta el último suspiro. Puchol II y Héctor dominaban el marcador con claridad (55-35), pero se relajaron ligeramente, y Fageca y Pere aprovecharon para dar un último susto que casi acabó en remontada. En el tramo final, los subcampeones se mostraron más enteros físicamente que sus rivales, y anotaron tres juegos (55-50) que encendieron las gradas de Guadassuar, muy ambientadas por la cita decisiva de este campeonato de promesas.

Partida a cara de perro

El encuentro comenzó con una intensidad enorme. Puchol II y Héctor dominaron desde el principio, apagando bien el ímpetu de Pere con una buena defensa y un mejor ataque. En este sentido, destacaron los dos, tanto el mitger de Vall de Laguar como el resto de Vinalesa, que se adaptó perfectamente al juego sin galerías a pesar de no estar demasiado acostumbrado en su día a día. Héctor, por su parte, jugó bien sus bazas, un pelotazo menos violento que el de Pere y Fageca, pero con más criterio y cabeza.

Con esta dinámica, en la que cada ataque de Fageca y Pere era contestado con solvencia por Puchol II y Héctor, se llegó al 35-20 para estos últimos. Fageca decidió entonces cambiar la pelota por una más viva. Lejos de beneficiarle, el cambio dio alas a los golpes de Héctor y Puchol II, especialmente inspirados para finalizar quinces tras largos intercambios de golpes.

Del 35-20 se pasó al 45-30, con la pareja campeona sujetando el encuentro, y de ahí, al 55-35, cuando todo parecía sentenciado. En un arranque de orgullo, tal vez viéndolo todo perdido y más relajados, Fageca y Pere pusieron el miedo en el cuerpo a Puchol II y Héctor, que tuvieron la fuerza justa para, tras un par o tres de vals para acabar, sentenciar la partida con el 60-50 final. El público dedicó una gran ovación a los pelotaris en agradecimiento por el espectáculo ofrecido.

Puchol II: "Nos hemos relajado un poco"

A Puchol II y Héctor les costaba respirar después de la paliza de la final: «La partida ha estado muy igualada, ellos han jugado también mucho. Al final nos relajamos un poco y ellos nos adelantan», resumía Puchol II. El joven resto de Vinalesa reconocía que la victoria es importante de cara al debut en la Copa Diputació: «Esto me da muchos ánimos y confianza. El equipo que me ha tocado, con Javi y Herrera, me gusta. Mi papel será hacer un buen dau y, en el rebot, encararme arriba, a la galería», explicaba el pilotari, que aplaudía torneos como la Lliga Oxford: «El paso de promesa a profesional es complicado y estos campeonatos lo facilitan».

Héctor estaba literalmente fundido: «Estoy muerto, pero he disfrutado mucho jugando a pilota», reconocía el mitger, que coincidía con su compañero: «Siempre viene bien ganar, y más ahora, porque nos da una inyección de moral para la Copa».