Lorena Martínez y Jen Lee son dos árbitras valencianas que pasaron de ser jugadoras, de Tatami y CAU respectivamente, a arbitrar en competiciones territoriales y nacionales, experimentando de primera mano el notable y progresivo crecimiento del rugby femenino en los últimos años. Lorena y Jen son ahora las únicas colegiadas de la C. Valenciana que arbitran la División de Honor B Femenina.
El rugby ha conseguido en estos últimos años convertirse en una de las disciplinas más involucradas con la expansión del deporte femenino. El continuo crecimiento del número de jugadoras, árbitras o entrenadoras en las grandes competiciones, sumado a la creación de la liga División de Honor B femenina es buena prueba de ello. El cuerpo arbitral de esta categoría está formado íntegramente por mujeres, de las cuales dos son valencianas, la antigua jugadora del CAU Jen Lee y la ex de Tatami Lorena Martínez.
Las dos árbitras valencianas están muy cómodas en esta categoría, y destacan la ambición de los equipos y el aumento de nivel en comparación a las ligas territoriales que acostumbran a pitar. «Las chicas están dando algo extra, y eso me motiva a hacerlo lo mejor que pueda», comentaba Jen en una entrevista concedida a SUPER.
Ambas dejaron su carrera como jugadoras para dedicarse al mundo del arbitraje, hecho que resulta llamativo en el mundo del deporte. A la hora de llevar a cabo este cambio, las dos tenían como principal objetivo aprender más reglamento y seguir vinculadas al rugby, que como defiende Lorena «es un deporte que engancha al 1000 por 1000», y el arbitraje les comenzó a aportar metas diferentes que como jugadoras.
Las dos afirman que el hecho de haber jugado durante tanto tiempo les ayuda mucho en su faceta como árbitro. Jen destaca la ventaja que le da el saber leer el juego para posicionarse bien en cada jugada, y Lorena además valora la capacidad de entender las diferentes circunstancias que influyen en los jugadores cuando cometen una falta o van a ser amonestados. «Intentas ponerte en la posición del jugador cuando vas a sancionar, pero no nos podemos guiar solo por eso, tenemos que ser prácticas», argumentaba Lorena.
Cabe destacar que Jen Lee decidió dar el paso a arbitrar tras una gran carrera como jugadora, culminada en 2019 con el bronce en el Mundial de rugby touch. «Como jugadora he llegado al máximo que podía llegar, y en el arbitraje me queda bastante por delante», explicaba la medallista. Por su parte, Lorena fue miembro del cuerpo arbitral de la final del Europeo 2019 entre España y Holanda, con 9000 espectadores en la grada, récord del rugby femenino nacional.
Las valencianas destacaron que de un tiempo a esta parte el crecimiento del rugby femenino valenciano ha sido brutal. Lorena también es miembro de la Federación Valenciana de Rugby, y destacó que, de un año para otro, el número de fichas aumentó en casi 500, datos impensables cuando las dos comenzaron en este deporte. Jen, además, entrena al equipo de la Universitat Politècnica de València, y el aumento de nivel también lo ha notado en esta faceta. «Hace 5 años las chicas empezaban en la facultad, ahora llegan ya formadas», explica.
El haber jugado a rugby en los equipos valencianos CAU, en el caso de Jen, y Tatami en el de Lorena, les permite tener una visión del encuentro más experimentada, siendo capaces de anticipar las diferentes jugadas de los equipos, posicionarse mejor sobre el terreno de juego y entender al jugador en cada instante; capacidades muy valiosas para llegar a un nivel superior en el mundo del arbitraje.
Jen Lee consiguió en mayo del año pasado la medalla de bronce en el Mundial de rugby touch representando a Inglaterra, y destaca este torneo como uno de los más especiales de su carrera.
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