No pudo ser, y la diferencia de nivel entre las dos plantillas se notó en el campo madrileño del Valle del Arcipreste, donde Les Abelles se estrenó de forma histórica en la Liga Iberdrola ante Majadahonda (72-5). Nunca antes un equipo valenciana había jugado en la élite del rugby femenino español.
La potencia de las madrileñas y su familiaridad con la División de Honor pudo más que las ganas y la ilusión de las valencianas, con Ana Abril autora del primer ensayo del rugby de la terreta en la máxima categoría, con el marcador en 28-0 en el minuto 19.
La segunda parte fue un calco de la primera, y aunque las pupilas de Guillermo Ahuir nunca bajaron la guardia, las madrileñas eran dueñas y señoras del terreno de juego. Al final 72-5 para Majadahonda, un equipo que seguro luchará por ganar esta liga durísima, que se toma un descanso hasta después de las fiestas navideñas.
Tampoco tuvo suerte en la División de Honor masculina Les Abelles, que presentó en el campo del Barça hasta ocho cambios con respecto a la alineación que ganó en el Pantera al Ciencias de Sevilla. Los catalanes necesitaban ganar y con bonus para afianzarse entre los mejores de la tabla, pero los primeros minutos hacían presagiar un partido muy igualado.
Las incursiones de los centros locales hacían mucho daño en la defensa valenciana. Terminó el primer tiempo con un 30-7 que hacia justicia. Los locales salieron dispuestos a cerrar el partido, y Guedes hizo dos nuevos ensayos. Pese al 44-7, nunca tiraron la toalla los valencianos, y Sabadín y Ozu lograron dos nuevos ensayos ambos transformados por Sorribes, antes del cierre de los locales con 51-21.
División de Honor B
Por otro lado, en la División de Honor B, el CAU Valencia y La Vila no frenan y siguen invictos tras ganar al Babarians Calvià (38-22) y al Akra Barbara (10-78) alicantino respectivamente. Mientras, Tatami y Valencia perdieron dos duelos muy ajustados ante Gotics (25-22) y L'Hospitalet (22-15).
El CAU sumó su quinta victoria en un partido duro e intenso. Las dos delanteras se han fajado en el campo y han luchado por el balón pero el poderío del CAU se ha impuesto al buen hacer de su rival. Los locales además han conseguido el bonus ofensivo en la última jugada del partido.
La primera parte empezó con el CAU mandando y logrando dos ensayos que en los primeros minutos que no consiguieron transformar ni Mcilroy ni Andrés. Parecía el mismo guion de otros partidos con el conjunto valenciano doblegando a su rival pero nada más lejos de la realidad. Los baleares se rehicieron, comenzaron a dominar el juego y le dieron la vuelta al marcador con un ensayo con trasformación y con un golpe de castigo. Al descanso 10-15 para los visitantes y la sensación que iba a ser duro ganar el partido.
Y la segunda parte fue intensa y emocionante. El CAU volvía a golpear dos veces, en esta ocasión logrando trasformar los tiros a palos para dejar el marcador en el minuto 50 24-15. Parecía de nuevo que ya el choque estaba decidido pero reaccionó Babarians que con un ensayo y trasformación dejaba el resultado en 24-22.
Empezó entonces un partido nuevo, trabado, de juego duro, de alternativas. Y en ese escenario el CAU fue mejor. Los visitantes se defendían de las acometidas locales y mantuvieron el marcador hasta el minuto 78 donde la fuerza de la delantera del CAU firmaba la victoria con ensayo de Bernie y trasformación de Andrés. Pero el CAU quería más, quería el pleno de victorias y de bonus.
Lo buscó de todas las maneras posibles y sólo lo encontró en la última jugada del partido cuando parecía ya imposible. El balón era del rival y un error dejó el oval en tierra de nadie. El más listo fue Andrés que corrió tras la patada de un compañero para ensayar ante la mirada perdida de sus rivales que habían estado aguantando de manera numantina. La transformación del propio Andrés ponía el definitivo 38-22 y marcó el final de un choque entre dos grandes equipos.
