Atletismo

Semenya, de nuevo ante el Tribunal de Estrasburgo

La corte le dio la razón hace diez meses y la atleta ha vuelto este miércoles para la vista de revisión de su caso

Semenya y su abogado acuden a apelar ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo en 2019

Semenya y su abogado acuden a apelar ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo en 2019 / Laurent Gillieron

EFE

Diez meses después de que el Tribunal de Estrasburgo le diera la razón, la atleta intersexual sudafricana Caster Semenya regresó este miércoles a la Gran Sala de esa misma corte para la vista de revisión de su caso.

Suiza, respaldada por la federación internacional de atletismo (World Athletics), apeló aquella sentencia dictada el 11 de julio de 2023, que pasó así a la Gran Sala, que emitirá en unos meses una sentencia contra la que ya no cabrá recurso.

Semenya acudió a la vista, pero no tomó la palabra, dejando esa labor a sus abogados, que pusieron de manifiesto el "impacto personal y profesional" sufrido por la atleta por la prohibición de participar en competiciones internacionales a causa de su elevado nivel de testosterona.

Semenya durante una carrera de 1.000m en Rabat

Semenya durante una carrera de 1.000m en Rabat / Abdelhak Senna

Los letrados indicaron que pese a ese veto, no se plegó a la imposición de inyectarse "un tratamiento nocivo, inútil y pretendidamente correctivo" para bajar su nivel de testosterona y poder competir.

Historia del "Caso Semenya"

La atleta saltó a la luz en los Mundiales de 2009 de Berlín, cuando con 18 años se alzó con el oro de los 800 metros, su distancia favorita, levantando una oleada de sospechas basadas en su aspecto físico y su voz varonil.

Fue apartada de la competición once meses, durante los cuales fue sometida a diversos exámenes médicos, antes de que en julio de 2010 fuera autorizada de nuevo a correr.

A partir de 2018, la federación internacional endureció las condiciones de participación en lo relativo a los niveles de testosterona, un reglamento validado al año siguiente por el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), con sede en Suiza.

El recurso ante la justicia helvética fue rechazado en nombre de la equidad de la competición, lo que motivó que Semenya acudiera al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, con sede en Estrasburgo.

Esta instancia condenó a Suiza por haberse lavado las manos ante la decisión del TAS, y consideró que la mediofondista sudafricana no tuvo las garantías institucionales y de procedimiento suficientes para hacer valer sus argumentos de discriminación, que los jueces consideraron "creíbles" y "bien fundamentados".

Semenya después de ganar una carrera de la IAAF Diamond League en Doha

Semenya después de ganar una carrera de la IAAF Diamond League en Doha / Noushad Thekkayil

Aquella sentencia ponía en cuestión la doctrina de muchas federaciones sobre los atletas intersexuales, que se basa en los niveles de testosterona para permitirles participar en pruebas femeninas.

Obligación que solo se aplica a las atletas con un sistema genético XY, correspondiente a las mujeres, y no a los que tienen XX, el de los hombres.

Sudáfrica apoya a Semenya

El Gobierno de Sudáfrica mostró su apoyo a la atleta ante la audiencia que debe celebrarse este miércoles. En ella, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) de Estrasburgo se pronunciará sobre el recurso interpuesto por Suiza, condenada por discriminar a la deportista.

"Todo deportista, independientemente de su género o atributos físicos, debería tener derecho a competir sin enfrentarse a obstáculos injustos", dijo en un comunicado la directora general en funciones del Departamento (Ministerio) de Deportes, Artes y Cultura de Sudáfrica, Cynthia Khumalo.

"Confiamos en que la sentencia de la Gran Sala (del TEDH) respetará estos principios y brindará un resultado positivo para Caster y todos los deportistas afectados por desafíos parecidos", añadió Khumalo.