La castellonense Sara Sorribes se ha quedado en solitario como la única esperanza del tenis español en el torneo suizo de Gstaad, dotado con 250.000 dólares.

La valenciana, numero 83 del ranking WTA, se impuso este miércoles en un duelo inédito a la rusa Valentyna Ivakhnenko, número 181 del mundo, por 7-6 (5) y 6-1, y se clasificó para los cuartos de final.

La rusa, procedente de la fase previa, solo fue rival de la de Vall d’Uixó en el primer set, que se tuvo que cerrar en el decimotercer juego tras romperse cada una tres veces su saque. Pero la segunda manga fue un paseo para Sorribes, pese a perder su primer saque. Seis juegos seguidos ganados le permitieron encarrilar el triunfo tras 1 hora y 43 minutos de partido.

En segunda ronda, Sara Sorribes se enfrentará a la alemana Tamara Korpatsh, que se deshizo ayer de la suiza Stefanie Voegele (6-2 y 6-0).

También en dobles

La vallera es la única superviviente española en el cuadro individual, tras las derrotas de Lara Arruabarrena y Silvia Soler el lunes y el martes respectivamente.

Y este jueves además tendrá que doblar, pues al partido de individual, a las 13:30 hora local, añadirá dos turnos después el de dobles, formando una pareja de valencianas junto a Silvia Soler.

Ambas se medirán con las holandesas Quirine Lemoine y Eva Wacanno en busca de la clasificación para semifinales. En cuartos está también clasificada Arruabarrena, junto a la suiza Timea Bacsinszky.