La gesta del jersey amarillo del Tour femenino

La gesta de Lotte Kopecky, el de cualquier corredora profesional, de vestir el jersey amarillo del Tour, se cumplirá posiblemente hasta las cuestas del Tourmalet para convertirse, salvo sorpresa este viernes, previa a la gran etapa pireniaca, en la primera ciclista profesional que sube al ‘monumento’ pirenaico con el ‘maillot’ de líder oficial de la ronda francesa, el mismo, con idénticos patrocinadores, que lució Jonas Vingegaard hasta su victoria en los Campos Elíseos.

Kopecky, ciclista flamenca, es compañera de equipo de Demi Vollering en el SD Worx, uno de los pocos conjuntos femeninos sin versión masculina en el campo profesional, y una destacada especialista de pista con ocho medallas de oro, repartidas a partes iguales entre campeonatos del mundo y campeonatos de Europa. Se vistió de amarillo gracias a su fuga en la primera etapa y ha sabido hasta ahora conservar la prenda, en lo que es una estimable ayuda, menos presión y más descanso, para Vollering, que se libra de la ceremonia del podio, de las conferencias de prensa y también de las colas en el control antidopaje, que sigue habiendo análisis diarios, aunque ahora, afortunadamente, ya sea un tema secundario tras los años negrísimos que golpearon a este deporte.

Tampoco era una corredora que se hubiera distinguido muchos en carreras por etapas, aunque cuenta con triunfos parciales, puesto que había destacado más como una buena clasicómana, es decir; una especialista en carreras de un día. Kopecky goza de triunfos en el Tour de Flandes, que ha vencido en dos ocasiones, la Strade Bianche, al margen de haber sido subcampeona del mundo en 2022.

Difícilmente conservará el jersey tras el Tourmalet y a falta de la contrarreloj final del domingo, porque para las cuestas pirenaicas está su jefa Vollering, en la etapa reina de esta segunda edición del Tour Femmes. Este jueves, con llegada a Albi, la patria de Toulouse-Lautrec, victoria en solitario de la corredora alemana Ricarda Bauernfeind, que aguantó el tirón en los últimos kilómetros de las campeonas de Suiza (Marlen Reusser) y de Alemania (Liane Lippert, en el Movistar, y ganadora de la segunda etapa de la prueba). Las favoritas llegaron todas juntas.

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