Cenk no se encuentra y enero podría ser la salida

Una de las conclusiones que dejó el pobre partido que ofreció el Valencia en Villagarcía de Arosa fue que Cenk Özkacar ha perdido la confianza que mostró a inicio de año. Sus dos primeros partidos actuando en el eje de la zaga junto a Paulista, con Diakhaby por delante como ‘6’, nada se asemejan al rendimiento que está ofreciendo a día de hoy.

El Arosa de Tercera Federación a punto estuvo de darle un disgusto a los de Rubén Baraja, en parte gracias a una serie de desajustes provocados por el central turco, que no estuvo acertado ni en las asociaciones con sus compañeros ni en los despejes. 

El joven zaguero no jugaba con el Valencia desde el 7 de octubre frente al Mallorca, cuando actuase de lateral zurdo por la lesión de Gayà, pero es que de central, su posición natural, no jugaba desde el 27 de septiembre ante la Real Sociedad en la jornada 6. Es más, sus últimos partidos con Turquía, donde es un fijo, han sido actuando en el carril zurdo. 

El de Izmir ha perdido la confianza, y parece que también la del Pipo. Los problemas físicos tanto del capitán como de Jesús Vázquez parecían abrirle la puerta de la titularidad, pero la irrupción de Yarek en el perfil zurdo le ha cerrado la puerta a tener más continuidad.

Es por eso que no se descarta que en enero haga las maletas en busca de los minutos que no tiene en Mestalla, en la que tanto Mosquera en el eje de la zaga como Yarek en el costado zurdo, están cogiendo galones. Quinto central de la plantilla si contamos al de Polinyà del Xúquer por delante y, por lo menos, tercer lateral zurdo de la rueda, una situación que contrata con que hace apenas cinco meses se pagasen cinco millones de euros para ejercer la opción de compra sobre el otomano. 

Se depositó una gran confianza en Cenk en verano apostando en él como central de presente y futuro en el club, pero que no se explica teniendo en cuenta que se quiera promocionar a jugadores de la cantera como Mosquera o Yarek, que ya están por delante de él en cuanto a jerarquía. El ‘15’ tiene algo menos de un mes para convencer tanto al Pipo como a la dirección deportiva que puede tener hueco en este Valencia y que puede aportar, como hiciese a inicio de curso.