No permitió brillar a una estrella como Sofia Jakobsson y secundó la defensa ante la hiperactividad de Jessica Martínez o Lorena Navarro. María Jiménez tuvo un debut importante en la Primera Iberdrola, directa al once titular, ante un Real Madrid con la careta oficial del Tacón. Nunca olvidará todo lo vivido. La alicantina (19 años, generación 2000) conquistó la oportunidad por la que lleva trabajando desde niña. Resistió hasta el minuto 70, cuando Irene Ferreras le sustituyó por María Ortiz, tras retorcerse de dolor por unos calambres un momento antes. Compitió hasta el límite en un choque de máxima exigencia. María Jiménez exhibió su personalidad para salir jugando y expuso su potencia para ganar duelos cuerpo a cuerpo, sobre todo, en una de sus especialidades, el juego aéreo, con el que también intimidó en el área rival. La central respondió a la confianza de su entrenadora, que ante la baja por lesión de Cubedo apostó por lanzar a la dorsal 28, categoría y futuro.

María Jiménez llegó en verano procedente del Levante UD. Tras dos tempordas, el Valencia se presentó con la condición que no sintió como granota: la confianza, un plan para ella. Paso a paso. María tiene ficha de filial, pero está integrada en dinámica de primer equipo. En el B también juega su hermana Claudia, un cañón en la delantera. Nacida en Alicante, la defensa comenzó en el Azorín, desafiando a chicos, formó parte durante siete años del Sporting Plaza Argel y luego pasó por el Elche. El estreno ante el Tacón debe ser sólo el principio de algo muy grande.