El Valencia CF consiguió rascar un empate en el feudo del Madrid CF, un punto que debe ser de inflexión con la vista puesta ya en 2020. Con el tanto de penalti de Flor Bonsegundo en los últimos instantes del encuentro, las pupilas de Irene Ferreras han podido cortar una serie negativa de cinco derrotas.
El viento presidió un partido en el que la necesidad de sumar y las bajas volvieron a condicionar el juego del Valencia. Aún así, las blanquinegras dieron señales de vida. Pese a haber encajado el primer tanto a los 72 minutos, el equipo no desfalleció hasta que dio en el minuto 86 con un justo premio para el último duelo de 2019. Una de las trabas en el camino que han encontrado las valencianistas ha sido el arbitraje. Por ejemplo, ayer la gallega Eugenia Gil no atendió a las protestas del Valencia, reclamando penalti, por una caída en el área de Goeieman a los ocho minutos.
Pese a ello, el equipo de Ferreras siguió con su dominio. Carol no pudo rematar después cerca del gol un centro de Alejandra. El Madrid, que había estado agazapado, dispuso de su primera ocasión a los 23 minutos. Pi estuvo felina salvando el gol de Bruna. Carol, en los minutos 35 y 37, volvió a protagonizar la respuesta visitante con dos remates que no vieron portería.
En la segunda mitad el Valencia sufrió más, en buena medida, por culpa del intenso viento. Sin embargo, Alejandra puso el miedo en el cuerpo de las locales con un disparo al larguero. La mala suerte prosiguió con el gol del Madrid tres minutos más tarde. El panorama se había ensombrecido, pero el Valencia dio muestras de vida. Reaccionó al golpe y en el 86' Alejandra -genial toda la tarde- provocó el penalti del 1-1 final.
El equipo es duodécimo con 12 puntos. El 2 de enero retomará los entrenamientos con la mira puesta en el choque con el Depor del día de Reyes. El Valencia recargará pilas física y anímicamente en el parón navideño con el objetivo de recuperar lesionadas, el mejor estado de forma y los buenos resultados.
