El Valencia CF presentará el próximo 11 de diciembre un presupuesto para la temporada 20/21 que arroja un déficit de 26'4 millones de euros a pesar de que contempla un saldo positivo de 41 en ventas de futbolistas, después de un mercado de verano en el que no realizó ningún fichaje y, por contra, causaron baja jugadores importantes. Una situación que en el informe de gestión elaborado por el club se justifica por el hecho de "adecuar el coste de plantilla a los ingresos de la 20/21 y cumplir el fair play financiero". Con estas variables, y teniendo en cuenta que se va a mantener durante los próximos meses la incertidumbre respecto a ingresos por la situación sanitaria, el club vislumbra con cierta prudencia la posibilidad de reforzar el equipo en el momento en que se abra de nuevo el mercado el próximo mes de enero. Con prudencia, pero la contempla y trabaja sobre la base de hacer entre una y dos incorporaciones.

Las prioridades, tal como han puesto sobre la mesa el entrenador y el secretario técnico, son las mismas que en verano, las urgencias apuntan a un defensa central y un pivote para el centro del campo, mucho más después de producirse hace apenas dos semanas la salida de Kondogbia al Atlético de Madrid. Dos posibles refuerzos que ahora se encuentran en estado embrionario aunque, si algo está claro, es que serán incorporaciones de bajo coste y buscando un rendimiento inmediato, lo que necesite en ese momento el entrenador. El Valencia, que ya tiene muchos jóvenes en plantilla, trabaja para esta nueva ventana de fichajes en base a futbolistas ya hechos y que se puedan poner a tiro para venir cedidos, sin compromisos de compra ni apuestas de futuro.

El Valencia CF cerró el pasado 5 de octubre el mercado sin fichar, hecho que provocó el enfado de Javi Gracia y el posterior intento de rescindir su contrato. No hubo refuerzos principalmente porque a última hora el club no pudo sacar a jugadores como Gameiro, Cheryshev o fundamentalmente GameiroCillessen, un problema que se mantiene porque, para colmo, el guardameta acaba de pasar por el quirófano y estará de baja varios meses. Peter Lim, además, no aceptó llevar a cabo operaciones que ofrecían dudas, caso de Jeison Murillo. Fichar por fichar, no.

Precisamente la salida de Kondogbia ha aliviado la parte económica y abre además un hueco en el límite salarial que establece LaLiga. En el club saben que la plantilla tiene carencias, sobre todo más allá del once titular. Influye el hecho de competir solo en Liga y Copa esta temporada pero está claro que la apuesta estará también en función de los resultados, cómo han evolucionado los jóvenes y si está más o menos cerca de posiciones europeas o, por contra, hay riesgo o temor de caer en la zona de peligro.