Las redes sociales se han vuelto locas en València y todo el mundo habla del regreso de Otamendi con un tono positivo que asusta. Puede ser caro, se puede negociar, Alemany lo tiene en su agenda y al personal le pone su posible fichaje. Así las cosas doy por sentado que es un gran sueño para todos, complicado de ejecutar pero sueño al fin y al cabo, y el principal interesado en toda esta historia es el propio Otamendi, que manda mensajes encriptados en las redes haciendo un claro guiño al valencianismo. Él quiere venir a la que fue su casa y sabe que en estos momentos ha comenzado a funcionar la ingeniería de Alemany para poder cumplir un sueño de todos y hacerlo de alguna forma viable. ¿Que Otamendi es un gran jugador con un carácter especial? Pues sin duda, es alguien distinto que tiene en su poder lo más grande que puede poseer un exjugador del Valencia. La gente lo quiere y lo admira por su forma de jugar, pero más todavía por ese carácter luchador que le acompaña. Sabemos, ténganlo claro, que Otamendi va a hacer todo lo que esté en su mano para que este posible regreso no suponga un grave problema para el Valencia. Él ya ha comenzado a moverse con tal de convencer a su club de que un traspaso es posible y rentable. Las cartas están sobre la mesa y la incógnita no tiene pinta de despejarse en dos días, pero lo que sí es cierto es que existe interés en contratarle y en ese terreno entra en juego la poderosa y hábil forma de gestionar de Alemany que nos está dando una lección de como se dirige, sin alzar la voz, un equipo de fútbol. Y el tema está así. Hay un jugador, Otamendi, que quiere jugar en el Valencia CF La pelota está ahí, pero tampoco debe ser una espera casi eterna.
¿Pareja con Garay?
No es mi intención poner a nadie de suplente ni de titular en el futuro Valencia CF, pero no puedo dejar de pensar en una dupla que sería espectacular en el centro de la defensa. Un defensa con carácter a la izquierda en la retaguardia llamado Nicolás Otamendi, acompañado a su derecha por otro central de garantías que responde al nombre de Ezequiel Garay. Ambos rematan de cabeza de lujo y defienden de narices. Y sí, si yo fuera Alemany intentaría inventar una de las mejores operaciones de mi vida. Sería la bomba.
Defender bien es clave
Y les voy a ser sincero. A todos nos gustan los goles a favor, pero yo tengo una especial debilidad por evitar los goles en contra, una debilidad que la temporada pasada nos ofertó un montón de garantías. Y oigan, con Otamendi en el equipo nos hacemos más fuertes en retaguardia.
