La Policía Local estaba atenta a la celebración del debate entre los candidatos a nuevo presidente de l´Agrupació de Penyes Valencianistes (APV). Y, aunque finalmente los cuerpos de seguridad no tuvieron que personarse en la sede social de las peñas de Mestalla, el debate, moderado por Paco Lloret, fue tan caliente como se esperaba. La candidatura de Guillermo Llorens acusó al principal favorito para las elecciones de esta tarde-noche, Blas Madrigal, de «mentiroso», de revender las entradas adjudicadas por el VCF a 50 euros y de la falsificación de delegaciones de voto en las últimas asambleas.

Un circo de descalificaciones personales que, según su versión, provocó que el tercer candidato en discordia, Juan Escrivá, renunciase a presentarse a las elecciones antes de delegar su voto a Madrigal. «Se están diciendo bobadas y estamos aburriendo a los peñistas. Ahora renuncio a presentarme. Hasta aquí llega la broma», sentenció Escrivá, quien fue «tirado» de la Junta Directiva de Jaume Part «en 2007 por denunciar irregularidades administrativas».

El primero en tomar la palabra, conforme al orden alfabético establecido, fue Escrivá. Después alternarían sus turnos los dos candidatos que se presentan hoy a la elección. Llorens, tras exponer los puntos de su programa, preguntó con dureza a Blas: «¿Cómo ha podido dejar tantos cadáveres por el camino después de 18 años?», además de insinuar que el portavoz del equipo de Madrigal, Manolo Mas, podría estar impuesto directamente por Manuel Llorente. Además, su grupo quiso saber si Mas y el resto de profesionales cobrarán que irán con Madrigal por sus servicios. Los ataques no cesaron: «Sabe mentir muy bien, le pido que exponga su proyecto económico y de dónde sacará los fondos… No sé si será vendiendo entradas de cortesía en Mestalla o de qué fórmula». Incluso avanzó que «el viernes, cuando acaben las elecciones», presentará «una denuncia en el Juzgado por todos los malos hábitos».

Blas Madrigal no respondió directamente a la pregunta sobre el modelo de financiación de su proyecto, debido a la ausencia de la persona de su grupo encargada para tal fin. Sin embargo, el anterior vicepresidente sí contraatacó, afirmando que «hay aquí un candidato —en referencia a Llorens— que con 2.800 euros compra la presidencia de una peña». En cuanto al affaire de las entradas explicó: «A mí las entradas me las da un señor… Otros clandestinamente haciendo pancartas tapan los carteles de empresas comerciales… Me las regala un señor que lleva 37 años trabajando en este club, y son del sobrante que tiene. Esa persona es José Barberá y me ha autorizado a decir su nombre».

Entonces llegó el momento más tenso de la tarde. Un miembro de la candidatura de Llorens, Pepe Turpin, se levantó enérgicamente y mostró una supuesta fotografía de Madrigal vendiendo entradas. «¿Por qué las vendes a 50 euros si a ti te las regalan? Eres un mentiroso compulsivo… 18 años de cacique», le gritó, mientras otro peñista, David Cogollos, se levantaba para encararse con Turpin. Blas argumentó que lo único que ha hecho es sacar entradas, «y las empleadas del club lo saben», para peñas de Torregorda y Socuéllamos (Ciudad Real), Ayora, Jarafuel, Guareña (Badajoz), Chiva, Altea…

El otro punto álgido vino con prácticas fraudulentas en la delegación de votos con la anterior directiva, circunstancias que SUPER desveló en marzo de 2009. Este diario denunció las falsificaciones de firmas de delegación para la Junta General Extraordinaria del 16 de agosto de 2008. Sin embargo, aunque hizo referencia a «los faxes de 2008», la candidatura de Llorens aludió a supuestas irregularidades de la última Asamblea, la del 12 de marzo, para aprobar los presupuestos. Turpin mostró más documentos: «Una delegación del secretario de su peña con fotocopia del carné caducado, otra de la peña Paco Camarasa, depositadas ante notario…». Por su parte, Madrigal aseguró que él no ha falsificado nada ni ha visto a nadie hacerlo en su presencia. «Yo no las falsifiqué», respondió.

Finalmente, peñistas como Jaume (Llombai) y Fany (El Puig 200) recordaron a Llorens que las falsificaciones fueron con ambos en l´Agrupació. Llorens se defendió diciendo que «hace año y medio se intentó tirar a Part y desde ahí he sido persona non grata». «Le di mi palabra a Juame de aguantar los cuatro años», indicó.