Rueda el balón. Ha llegado el fútbol. El nuevo Valencia CF de Nuno Espírito Santo echa a rodar esta tarde (18:30 horas) en Alemania. No están todos los que son, pero sí son todos los que están. Es la realidad de esta plantilla incompleta a la que todavía le faltan piezas. Unos llegan desbordando ilusión, otros preparan su salida, los hay también que preguntan por la situación del proceso de venta para despejar la incertidumbre en torno a su futuro y hasta los que tienen sitio seguro seguro miran de reojo ante la inminente llegada de fichajes. Así de atípico es este ´stage´ de Herzogenaurach. Sin embargo, el partido y la ilusión de hacer bien las cosas les une hoy. El primer amistoso de la pretemporada es el mejor escenario para mostrarse y, sobre todo, para plasmar en un terreno de juego todos y cada uno de los «principios tácticos base», como dice Nuno, desarrollados en pretemporada por el cuerpo técnico.

El rival es el humilde SPVgg Bayreuth, club que milita en la Regionalliga Bayer, la cuarta categoría alemana, y que ya ha disputado su primer partido oficial de la temporada, en el que cosechó un empate contra otro equipo de nombre impronunciable. Los jugadores llegan más rodados, pero lo más probable es que se produzca una goleada, aunque el resultado poco importa. Es un partido de sensaciones. Nuno mirará con lupa. La afición también. Tiene ganas de olvidarse de tanto trasiego entre los despachos e ilusionarse en el campo.

El objetivo principal de Nuno en estos ocho primeros días de pretemporada ha sido hacer llegar a sus jugadores sus ideas futbolísticas. Hoy quiere comprobar que esos principios básicos han calado. El técnico tiene cuatro obsesiones. La primera la "organización". Su frase en Alemania es "el orden sale del desorden". Encontrar el equilibrio es el camino para proyectar el Valencia que desea. La segunda es la "intensidad y velocidad en la circulación". Ayer trabajó en espacios reducidos para trabajar la posesión. "Circulamos rápido para tener ventaja", decía en alto. El tercer aspecto del juego que quiere reflejado en el campo es "la presión organizada!". La ha trabajado entrenando, pero quiere verla compitiendo.

Por último y no menos importante, Nuno vigilará la "concentración" como. El lunes se lo decía a sus jugadores: "Es tan importante el primer balón como el último". Es uno de los aspectos clave en la libreta de Nuno Espírito Santo. Es el examen que el cuerpo técnico le hará a la plantilla en el Hans-Walter Wild Stadion. Nuno hará dos once diferentes para cada una de las partes. Cada futbolista jugará 45 minutos y cada portero 30. Nuno reconoció ayer que se ha encontrado un grupo con más calidad y disposición de la que esperaba. Ahora quiere verles competir. El partido servirá, por ejemplo, para ver como Alcácer se reivindica como ´9´ titular, para seguir disfrutando del fútbol de Parejo o la proyección de Gayà o para ver de nuevo a Diego Alves bajo palos.

Caras nuevas sobre el césped

Sin embargo, el mayor aliciente del encuentro son las caras nuevas. El partido será especial para los fichajes, las cuatro caras del nuevo Valencia, que entran en acción sobre el césped de Herzogenaurach: Nicolás Otamendi y Rodrigo De Paul, que están llamados a ser dos piezas básicas en la plantilla, así como para Carles Gil, que vuelve resuelto a presentar batalla después de sus dos temporadas en el Elche en calidad de cedido y para un Dani Ramírez que llega a Valencia procedente del Real Madrid con ganas de convertirse en un nuevo Mata. Los cuatro futbolistas están como locos por empezar a jugar. El de Bayreuth es el primer simulacro de la era Nuno, y SUPER los juntó ayer en el gimnasio del complejo deportivo de Adidas a pocas horas de su ´debut´ con la camiseta del Valencia.