Ciclismo

Miguel Induráin apadrina la Marcha Ciclista Avapace en el 50 aniversario de la asociación

La prueba solidaria se celebrará el próximo domingo 12 de junio con salida y llegada en la localidad de Bétera

Indurain apadrina la Marcha Avapace

Indurain apadrina la Marcha Avapace / sd

El Club Ciclista Avapace está mimando como nunca todos los detalles para que, el próximo 12 de junio, el millar de aficionados que se reunirá en la localidad de Bétera pueda disfrutar de un día feliz. Después de todo, en 2022 la Asociación que lucha por los derechos de las personas con parálisis cerebral celebra sus primeros 50 años de existencia. Es también la fecha para recordar que hace 10 años echaba a rodar esta particular marcha ciclodeportiva, la única cien por cien solidaria en el panorama autonómico. La Marcha Cicloturista de Avapace, único evento de ciclismo solidario en el calendario autonómico, se celebrará el próximo domingo 12 de junio con salida y llegada en la localidad de Bétera

El poder de los padrinos

La cita ciclista de este año tiene un sabor muy especial. Y es que, aunque Avapace ha logrado atraer a su lado a enormes figuras del ciclismo en años precedentes, esta edición del aniversario va a tener a un invitado de excepción: Miguel Induráin. El ciclista navarro, el único que ha logrado coronarse en el Tour de Francia en cinco ocasiones consecutivas, ha confirmado su presencia de forma altruista y estará el segundo fin de semana de junio en Bétera rodando al lado de los ya habituales amigos ciclistas de Avapace en una nueva cita que estará limitada a 1.000 participantes.

Los padrinos que han asistido a presentar o a participar en la Marcha han sido todos nombres de referencia en el ciclismo: inició la serie en 2012 el gran Angelino Soler y siguió otro valenciano, Ángel Casero. La tercera edición fue para Stefano Garzelli y la siguiente la protagonizó el mediático Perico Delgado. Samuel Sánchez rodó en la Marcha de Avapace el año 2017, cuando la cita reunió por primera vez a mil participantes y, un año después, fue el gallego Óscar Pereiro el que se subió a la bici. En 2019 fue el turno de un valenciano de palmarés asombroso: el paralímpico Maurice Eckhard y en 2020, en pleno confinamiento, el también paralímpico Ricardo Ten se convirtió en padrino de una edición sin recorrido, pero con maillot y contactos virtuales. Igual que la del pasado 2021, edición apadrinada por Fernando Escartín.

Un millar de participantes como límite

Por cuestiones organizativas y de seguridad, la Marcha Avapace está limitada a 1.000 participantes, una cifra que en cada edición se cierra antes. Este año, el ritmo de inscripciones es alto y la organización cree muy posible que se complete el cupo de participación un mes antes de la celebración del evento. Resulta evidente que, después de dos ediciones en las que no se ha podido organizar la marcha debido a la pandemia, las y los deportistas aficionados y amigos de Avapace tenían ganas de volver a reunirse. De hecho, el colectivo no ha olvidado en ningún momento a la asociación y, durante los años 2020 y 2021, aunque los y las deportistas no salieron a correr, mantuvieron su solidaridad con las personas con parálisis cerebral y adquirieron el maillot que se editó cada uno de esos años. Para los que aún no se han inscrito, recordamos que pueden reservar su plaza accediendo desde la web de avapace.org

Como en años precedentes, la Marcha es neutralizada y recorre algo más de 90 kilómetros con inicio y meta en Bétera. Su recorrido, bien conocido por los aficionados, pasa por las proximidades de Olocau, Lliria y Pedralba hasta llegar a Casinos, donde se ofrecerá un avituallamiento. El regreso se hace pasando de nuevo por Lliria y Olocau hasta llegar otra vez a Bétera, donde Avapace y diversas empresas patrocinadoras ofrecerán un almuerzo a los participantes y a sus familiares: fruta fresca y bocadillos, refrescos y café.

Una propuesta singular

La singularidad de esta Marcha viene marcada por dos elementos que la hacen completamente diferente a las del resto del calendario: el uso del maillot oficial es obligatorio para todas las personas participantes y todo el recorrido es neutralizado. El ritmo que marcan los coches de carrera suele estar entre los 26 y 28 kilómetros por hora y el resultado es el de un pelotón de un único color que provoca una impresionante sensación de unidad y se convierte en la metáfora perfecta del espíritu de Avapace.

Las inscripciones, dato bien conocido por los aficionados, incluyen el maillot solidario de Avapace con los calcetines a juego. Y este año, como no podía ser de otro modo, es de color dorado, en referencia clara a los 50 años de la asociación. Pueden sumarse a la marcha tanto los corredores federados como los no federados. Y, para quienes deseen colaborar con Avapace sin salir a la carretera con su bicicleta, también existe el Dorsal Cero. Se trata de un evento que destina el cien por cien de su recaudación a la asociación.

Avapace es una asociación que, desde hace cinco décadas, trabaja para mejorar la calidad de vida de las personas con parálisis cerebral. Entre sus centros para atender a niñas, niños y personas adultas con parálisis cerebral, cuenta con un colegio de educación especial y un centro de día en la localidad de Bétera. En la última década, esta organización ha encontrado en el deporte (fundamentalmente el ciclismo y el atletismo) un modo de visibilizar al colectivo al que representan y apoyar su integración y su participación como ciudadanos. Como reconocimiento a esta labor, en 2016 recibió la Medalla al Mérito Deportivo de la Ciudad de Valencia.