Andar es uno de los mejores ejercicios para perder peso. Es algo sencillo y que si consigues hacerlo de forma regular puede convertirse en tu mejor aliado a la hora de adelgazar. Además, andar te ayudará a fortalecer los músculos y a sentirte mejor. Eso sí, un simple paseo no hará que pierdas kilos. Para adelgazar andando debes cumplir una serie de metas diarias en cuanto a kilómetros recorridos y al tiempo empleado en hacerlo. ¿Cuánto hay que andar para adelgazar?

Para adelgazar andando debes recorrer cada día al menos 15.000 pasos. Solo así podrás comenzar a perder peso caminando. La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que para estar sano debes caminar unos 10.000 pasos al día. Sólo con ese movimiento tu cuerpo estará más ágil. Además, caminar 10.000 pasos al día ayuda a prevenir enfermedades como la obesidad. Pues bien, a este mínimo marcado por la OMS debes añadirle al menos 5.000 pasos más hasta llegar a los 15.000 pasos, o lo que es lo mismo unos 11 kilómetros. A partir de esta distancia, que debes recorrer de forma enérgica, comenzarás a perder peso.

El ritmo al que caminas también es fundamental a la hora de quemar calorías, al igual que la superficie que recorres. Si a tu caminata diaria le añades alguna cuesta y acabas la jornada subiendo a casa por las escaleras en lugar de por el ascensor tu figura te lo agradecerá.

Si realmente quieres conseguir tu objetivo de perder peso y lucir un cuerpo más bonito realizar ejercicio físico no será suficiente. Lo ideal es combinar la gimnasia con una dieta sana y equilibrada. Tomar alguna infusión adelgazante será el complemento ideal de tu dieta para adelgazar.

Andar es muy beneficioso para la salud.

Beneficios

Caminar de forma rápida es un ejercicio perfecto para tu organismo y no solo sirve para adelgazar. Al tiempo que te ayuda a perder peso, también mejora tu respuesta muscular y aumenta el consumo de calorías. Por otro lado, andar activa la circulación cardiaca y ayuda a controlar los niveles de colesterol y de glucosa en sangre. Y también ayuda a mantener controlada la presión arterial y mejora las funciones respiratoria, intestinal y sexual.