La huelga arbitral desata el comienzo de Primera Iberdrola más inaudito

La mañana del 10 de septiembre era la fecha indicada para que la temporada 2022/23 de la Primera Iberdrola tuviera su pitido inicial. Sin embargo, la amenaza de la huelga arbitral se ha llevado a cabo, al no alcanzar ningún acuerdo satisfactorio, y las reacciones en algunos equipos no se han hecho esperar.

En lo que estaba llamado a marcar un antes y un después para el fútbol femenino español, con el reconocimiento del profesionalismo de las jugadoras, además de la retransmisión de todos los encuentros a través de DAZN, ha quedado empañado por el aplazamiento de esta jornada 1. Hasta tres encuentros se han tenido que demorar. El primero de ellos, un plato fuerte entre el Atlético de Madrid y Real Sociedad, cuarto y segundo clasificado respectivamente en el pasado curso.

Los equipos estaban obligados a presentarse por parte de LaLiga pese a conocer de antemano la ausencia del trío arbitral. Esto propició que se dieran imágenes muy curiosas, como cuando saltaban al terreno de juego del Cerro del Espino vestidas de corto a la espera de un partido que no se iba a disputar. Durante treinta minutos se mantuvieron sobre el césped ejercitándose, hasta que transcurrido ese tiempo tomaron el camino de vuelta a los vestuarios y los aficionados que se dieron cita en las gradas también fueron abandonándolas paulatinamente.

Mismo desenlace tuvo los otros dos encuentros, continuando por el que debía enfrentar al Alhama CF ElPozo contra el Madrid CFF. El conjunto murciano, que hace su estreno en la máxima categoría, siempre recordará este peculiar "debut". María Pry, técnica del conjunto madrileño, habló claramente tras la suspensión, comprendiendo el derecho de huelga del estamento arbitral, pero reflexionando sobre que se había podido actuar de otra forma. "Como se ha hecho el debut del Alhama siempre será recordado, se han cargado la ilusión de jugadoras y afición", agregó.

Por su parte, en el tercer y último encuentro programado para las 16:00 horas entre el Villarreal CF Femenino y Real Madrid, las futbolistas permanecieron pacientemente durante el tiempo requerido y se encargaron mientras tanto de realizar una ligera sesión de entrenamiento como también de atender a los aficionados que les reclamaban fotografías y autógrafos.

Además de los equipos ya afectados, la internacional española Aitana Bonmatí se expresó a través de sus redes sociales, transmitiendo que las perjudicadas siempre eran las mismas, las futbolistas, a pesar de ser ya una liga profesional. Otros clubes como el Athletic Club han tenido que afrontar un vuelo a tierras tinerfeñas, con sus respectivos costes extra, aún sabiendo que estarán de paso.

A la espera de que se pueda resolver el conflicto, durante los próximos días de mediados de semana debería afrontarse la primera ronda de la Copa de la Reina, con la presencia de los dos conjuntos recién ascendidos. Sin embargo, salvo encontrar una solución a contrarreloj, también pueden peligrar los 16 partidos que deberían disputarse. Las árbitras mediante la RFEF reclaman percibir hasta 21.000 euros por cada compromiso oficial, con unas cantidades a repartir entre el trío arbitral y los gastos de gestión. La polémica sigue en pie.