Van Loo, de 21 años y jugador del Roulers, se desvaneció sobre el césped en un partido de la fase de ascenso a Primera División tras despejar un balón de cabeza y comenzó a sufrir convulsiones. El jugador sufrió un ataque al corazón, pero recuperó las constantes vitales gracias al desfibrilador que se implantó en su corazón hace un año cuando los médicos le detectaron un problema cardíaco.

"Hubo un momento de pánico pero el aparato le salvó la vida", explicó el doctor Bostoen. Anthony Van Loo fue evacuado en camilla y hospitalizado, donde se recupera satisfactoriamente.