"Teniendo en cuenta todos los condicionantes que se han dado desde el regreso a la competición y ante los hechos acaecidos en los últimos días en que varios clubes han elevado su voz por la injusticia y la falta de soluciones que se están produciendo, el RCD Espanyol defiende la eliminación de los descensos esta temporada en las competiciones tuteladas por Laliga, tal como ha sucedido en todas aquellas organizadas por la RFEF". Así ha comunicado el conjunto perico su decisión de que se anulen los descensos de la temporada 2019/20 tras entender que se ha visto afectado por tres puntos en concreto. Son los siguientes:

-Que no se disputara la última jornada de Segunda División.

-La ausencia de público en los estadios, algo mucho más perjudicial para ellos ya que se estaba jugando la salvación ante cinco rivales directos en la lucha por la permanencia.

-Clubes como el Valencia y el propio conjunto perico, que se vieron afectados con positivos durante la pandemia, con los problemas de salud y de preparación física que ello conlleva.

Tras enumerar esos tres puntos que explican "circunstancias que han ipedido que la liga se haya desarrollado en menor igualdad de condiciones para todos los participantes", el club perico destaca que "el impacto económico de la Covidien-19 se va a extender a la temporada 20-21. Si a esto se le suma el efecto económico que implica un descenso, el castigo acumulado es devastador e injusto para los afectados".El descenso del Espanyol

El cuadro 'perico' comenzó la temporada con David Gallego en el cargo tras la marcha de Rubi al Betis. Con él se llevó a Borja Iglesias y otro jugador importante como Mario Hermoso el curso pasado también abandonó el club para marcharse al Atlético. Sin el entrenador, al que tampoco le fue bien en esta 2019/20, y dos piezas importantes, las cosas empezaron a torcerse pronto. En la primera semana de octubre, la entidad blanquiazul ya prescindió de su técnico y apostó por Machín, que estuvo a un nivel notable en el Girona pero naufragó en el Pizjuán.

Con Machín, el equipo blanquiazul tampoco cambió el rumbo y las posiciones de descenso comenzaron a ser algo habitual para la entidad del RCDE Stadium. En la delantera no había gol, en la defensa jugadores como Calero, que llegaron en verano con etiqueta de titularísimos, no aportaron sobre el terreno de juego y el nerviosismo acabó llevándose también por delante el proyecto Machín. De fondo apareció Abelardo. Práctico y con las ideas claras. Además, las llegadas de Cabrera y RDT en invierno invitaban al optimismo. Empató contra Barcelona y Athletic y ganó al Villarreal. El juego mejoraba y el equipo parecía en línea ascendente, pero de nuevo frenazo. Desde el empate contra los leones hasta el parón solo lograron el triunfo contra el Mallorca.

A la vuelta, el triunfo contra el Alavés volvía a generar el éxtasis en la grada perica. Eso sí, un empate y dos derrotas después, Rufete prescindía de Abelardo y se ponía él mismo en el banquillo. El resultado: un punto de 21 posibles. Ahora, el conjunto 'perico' lanza un comunicado para tratar de evitar el descenso de uno de los grandes históricos del fútbol Espanyol.