El calvario de Lozano con Gattuso en el banquillo: "Fue terrible, lloraba con mi esposa de desesperación"

Genaro Gattuso es entrenador del Olympique de Marsella, cogiendo el testigo de Marcelino, que abandonó la ciudad tras un principio de etapa muy turbulenta con el sector más radical de la afición. El italiano pasó por banquillos como el del Valencia, justo antes de llegar a la Costa Azul, o la Fiorentina, donde ni siquiera comenzó la temporada tras discrepancias con la directiva durante el periodo de traspasos.

Sin embargo, su etapa más exitosa en el país transalpino, junto con la del Milan, fue en Nápoles, donde ganó su último título como entrenador. El de Corigliano se alzó con la Copa de Italia en la temporada 19/20 con el conjunto partenopeo. Durante esa etapa, pudo disfrutar de jugadores de mucho talento, como Insigne, Mertens o el español Fabián Ruiz. También coincidió con Hirving Lozano, jugador por el que se realizó una gran inversión procedente del fútbol holandés, pero que no pidió él, ya que 'Rino' llegó en sustitución de Ancelotti cuando este fue cesado.

El mexicano relata ahora en una entrevista en el programa 'Hugo Sánchez Presenta' su calvario en San Paolo con Gattuso, sobre todo en el primer año. "Él no me conocía, no sabía ni dónde jugaba, pero no me preguntó jamás nada. Tú sabes cuando eres futbolista que hay momentos que dices: '¡Wow! Aquí no van bien las cosas'. Cuando él llega va cambiando jugadores y a mí jamás me cambió", aseguró al histórico delantero azteca.  

"Siempre estuve en la banca y ahí fue cuando dije: 'Aquí hay algo'. Entonces, ese año fue terrible, lloraba con mi esposa de desesperación. Tú te das cuenta que eres mejor que muchos de ahí y te preguntas '¿Por qué no me dan? ¿Por qué no me dejan?'", afirmó el 'Chucky' sobre sus primeros pasos en Italia, y de cómo no tenía oportunidades.

Empieza a contar en la segunda temporada

Su segundo curso en el sur de Italia empezó a mejorar para el internacional por México. En la charla comentó que empezó a hablar cada vez más con Gattuso y que la relación empezó a encauzarse. "Me costó mucho trabajo en diálogos: Empezó a hablarme más, porque no me conocía, aunque en el primer año no cruzamos ninguna palabra. Entonces, ya se acercaba más y al segundo año me hablaba su cuerpo técnico", reconoció el ahora jugador del PSV. El propio Gattuso aseguró en su día que veía a Lozano mejor en ese segundo año con estas curiosas comparaciones. "Es un jugador distinto, tiene fuerza en las piernas, ahora cuando patea el balón no se cae al suelo como un niño".