Andalucía es una trituradora de entrenadores: solo aguanta Pellegrini

Por cuarta vez en los más de 90 años de historia de LaLiga, cinco equipos andaluces están compitiendo esta temporada en Primera División: Betis, Sevilla, Granada, Cádiz y Almería. Una circunstancia que se había dado anteriormente en las campañas 1971-72, 2008-09 y 2014-15. Un éxito para la comunidad más poblada de España que tenía otra contraprestación peculiar: por primera vez en la historia, ningún club de Andalucía juega en Segunda esta temporada.

Sin embargo, el éxito del verano se ha ido transformando en drama de invierno. Cuatro de esos cinco equipos, todos menos el Betis, ocupan cuatro de las cinco últimas plazas de la clasificación. Almería (13 puntos), Granada (14) y Cádiz (22) ocupan las posiciones de descenso desde hace algunas semanas, con el Celta (27) como cortafuegos esta semana con el Sevilla (28), que es quinto por la cola.

Solo el Betis (7º con 42 puntos) escapa de los apuros del fútbol andaluz este curso. Y es también el equipo verdiblanco el único que mantiene en la actualidad el mismo entrenador con el que arrancó la temporada, un Manuel Pellegrini que en los últimos años se ha ganado crédito de sobra, con el título de Copa del Rey de 2022 como gran aval.

Cacique Medina, destituido

Andalucía, en fin, se ha convertido en una trituradora de entrenadores esta temporada. Este martes se ha producido la última de las destituciones en esa zona de España, con la confirmación por parte del Granada de que Alexander Medina, más conocido como Cacique Medina, deja de ser su entrenador. José Ramón Sandoval asumirá la tarea casi imposible de escapar del descenso en las nueve jornadas que restan.

Sandoval será el tercer entrenador titular del Granada esta temporada, un trance que tanto el Almería como el Sevilla ya habían pasado anteriormente. El Cádiz, al menos de momento, solo ha hecho un relevo en el banquillo. En Andalucía se han producido siete ceses de entrenadores, mientras que en el resto de España solo ha habido otros cuatro: dos en el Villarreal, uno en el Celta y otro en el Rayo.

El Almería fue el más madrugador de todos, despidiendo a Vicente Moreno el 29 de septiembre. Alberto Lasarte ejerció unos días como interino hasta la contratación de Gaizka Garitano, que fue incapaz de ganar un solo partido en los más de cinco meses que estuvo al frente del equipo. Pepe Mel, en cambio, debutó este fin de semana en el banquillo almeriense con victoria, la primera de la temporada.

La crisis del Sevilla

La campaña también ha sido muy agitada en Sevilla, donde José Luis Mendilibar fue destituido el 8 de octubre pese a haber ganado pocos meses antes la Europa League. Víctor Orta, director deportivo hispalense, apostó por Diego Alonso, cuyos resultados fueron catastróficos en los apenas dos meses que estuvo al mano. Quique Sánchez Flores manda en Nervión desde mediados de diciembre, pero tampoco está consiguiendo sacar al Sevilla de la parte baja.

En el Cádiz solo ha habido un cambio de entrenador, después de que el largo crédito de Sergio González se agotara el 20 de enero. Mauricio Pellegrino regresó a LaLiga con la misión de salvar a los gaditanos, un objetivo que en la actualidad tiene a cinco puntos tras la victoria del Celta contra el Sevilla este domingo en el debut de Claudio Giráldez como entrenador celeste.

El Granada, por su parte, ha ido de mal en peor y llega a este último tramo de competición con escasas opciones de salvarse. Cacique Medina relevó a finales de noviembre a Paco López, sin conseguir los resultados esperados. Ahora Sandoval tiene ante sí el reto casi imposible de remontar al menos 13 puntos en apenas nueve jornadas.