El equipo ha retomado este viernes los entrenamientos tras la jornada de descanso del jueves y lo hace con todas las miradas en Arouna Koné, que en lo que va de semana aún no se ha entrenado con el resto del grupo. Sus molestias en el abductor de la pierna derecha tienen en vilo al cuerpo técnico, que a ciencia cierta todavía no sabe si podrá contar en él. Todo apunta a que va a ser duda hasta última hora para el partido del Betis.
El jueves las previsiones más optimistas apuntaban a que este viernes trataría de reincorporarse paulatinamente al trabajo en el mejor de los casos. Y es que con él se quieren dar pasos seguros. Pese a no tocar balón, el delantero está haciendo trabajo físico extra en el gimnasio y las sensaciones son positivas, pero las molestias todavía persisten.
Quedan cuatro entrenamientos antes del partido y por tanto suficiente tiempo para valorar alternativas en caso de que necesite un respiro y no llegue, aunque el jugador es muy optimista y cree que va a estar disponible. No sería la primera vez que yendo de menos a más consigue romper todos los pronósticos.
No obstante, es previsible que el entrenador trabaje alternativas en lo que queda de semana. Una de las variantes con más peso en este momento sería la de Ghezzal, que adelantaría su posición, con Rubén por detrás aprovechando la inercia de su gol en Barcelona. Respecto al argelino, lo cierto es que el cuerpo técnico está muy satisfecho con el rendimiento que está dando en los partidos, por lo que la idea es que tenga continuidad una jornada más.
