Se había posado un halo de duda sobre la adaptación al modelo de Mendilibar tras los últimos partidos, pero el Levante se presentó el miércoles con las grietas cerradas. El equipo destensado y frágil de Albacete se antoja ahora un recuerdo fofo del equipo que carbura a una semana del debut. Más allá de los vaivenes de la pretemporada, hay referentes que marcan el camino a seguir: el partido ante el Elche enlaza directamente con el del Hereenven, esbozando la hoja de ruta del entrenador.

"-Lo mejor- fue la solidez defensiva; el equipo estuvo muy serio en todos los aspectos atrás y esa es la línea a seguir; quizás nos faltó pegada", reflexionaba David Navarro tras el entrenamiento de ayer. El zaguero de Port de Sagunt fue titular ante el Elche y se impone como uno de los pilares inamovibles en el centro de la zaga. Junto a él, lo más probable es que Mendilibar opte por Vyntra en el debut liguero. Ambos han jugado dos partidos juntos. El primero fue contra el Barendrecht en la primera prueba de Vyntra durante la pretemporada. La pareja se llevó un tanto. En el segundo ensayo juntos, contra el Hereenven, los dos centrales exhibieron las mejores virtudes del ideal de Mendilibar.

Pero no se trata solo de los centrales: "Es verdad que quiere las líneas más adelantadas pero sobre todo que seamos un bloque, que ataquemos y defendamos juntos", reseñó Navarro. Esa era, precisamente, una de las preocupaciones que ocupaban al técnico en los últimos días. Tras este partido, como una descarga de alivio, el propio entrenador subrayó la fortaleza defensiva de su conjunto.

El manual del técnico dicta que el equipo avanzará metros respecto a la anterior temporada. "Él tiene su idea de fútbol. Tampoco hay que cambiar mucho, el Levante está jugando de una forma que va bien en los últimos años, pero él da sus pinceladas", corrobora el zaguero. Esas pinceladas no implican temeridad defensiva, como viene insistiendo Mendilibar. No en vano, una de sus premisas durante sus etapas anteriores ha sido la de asegurarse pocos goles en cuenta propia. Al frente de equipos modestos, como Valladolid u Osasuna, fue este último donde logró un equipo mejor pertrechado. Fue en la temporada anterior a su destitución en la cual, aun quedando en la zona media baja de la tabla, fue el equipo menos goleado tras los cuatro primeros del campeonato. Curiosamente una temporada anterior había logrado el mejor puesto con el equipo, dejándolo séptimo en Liga, pese a terminar como el quinto más goleado. En su primera temporada en Pamplona, cuando cogió al equipo en febrero, culminó octavo y se estableció como sexto conjunto con menos goles a sus espaldas.

No trata el técnico de componer un grupo exótico que renuncie a principios arraigados en Buñol. Tan solo, como observababa Navarro, añadir un matiz. El hecho de adelantar a defensa, según razonan desde su cuerpo técnico, se debe a que así logran desactivar antes los ataques del rival, mediante el robo o el fuera de juego. Es cierto que, ya se ha visto, el equipo ha quedado expuesto en ocasiones con facilidad al mano a mano con el portero. La última prueba permite pensar que cada vez serán menos.