Casi, casi tal día como hoy, un 21 de julio en lugar de un 13, arrancó en 1980 una huelga de actores que mantuvo en suspense a Hollywood durante tres largos meses y tres días. Fue convocada por el Sindicato de Actores de Cine (SAG, por sus siglas en inglés) y la Federación Estadounidense de Artistas de Radio y Televisión (o AFTRA), entidades fusionadas desde el 2012 en la SAG-AFTRA que ahora se prepara para unirse a la huelga de guionistas iniciada hace más de dos meses. 

En 1980, las exigencias no eran tan diferentes a las de 2023: los sindicatos buscaban una mejora de las condiciones salariales de sus miembros (en concreto, de un 35%), además de exigir una parte de los beneficios derivados de los lanzamientos en videocasete y la por entonces emergente televisión de pago.

Durante el tiempo que duró el levantamiento, se detuvo casi por completo la producción de cine y televisión. Entre las películas afectadas estuvieron 'Cómo eliminar a su jefe', aquel retrato de la vida oficinesca con Jane Fonda, Lily Tomlin y Dolly Parton, o 'El ojo mentiroso', thriller con William Hurt y Sigourney Weaver como, respectivamente, un humilde conserje y la bella reportera a la que engaña con una exclusiva para aproximarse a ella. Tom Selleck tenía ganas de despuntar con 'Magnum' (después de tener que renunciar al mismísimo Indiana Jones), pero el inicio de la filmación de la serie se detuvo por la huelga y el actor tuvo que trabajar como manitas para pagar el alquiler de la casita que ya había alquilado en Hawái.

Boicot a los Emmy 

Por otro lado, un evento emblemático perdió todo su lustre. La ceremonia de entrega de los Emmy del 7 de septiembre fue boicoteada por los sindicatos, lo que derivó en una flagrante ausencia de astros televisivos de la función. De los 52 intérpretes nominados, tan solo uno de ellos se presentó al evento: Powers Boothe, quizá por saber que iba a ganar por su papel protagonista en una miniserie de la CBS sobre el reverendo Jim Jones y el suicidio colectivo de 900 personas en Guyana. Lo de Boothe se puede calificar de suicidio social. "[Venir aquí] es lo más valiente o lo más estúpido que he debido hacer en toda mi carrera", dijo en su discurso de agradecimiento.

Uno de los que salió ganando con todo esto fue, curiosamente, el astrónomo Carl Sagan: es posible que su programa educativo 'Cosmos', estrenado en Estados Unidos durante la huelga, no hubiera tenido el mismo éxito de audiencia en un momento de mayor competición y con nuevos títulos de ficción en lugar de tantas reposiciones.

A los espectadores se les tuvo en suspense, por ejemplo, respecto a quién diablos había disparado a J.R. Ewing (Larry Hagman) en 'Dallas'. Las fechas previstas para la temporada de estrenos de otoño, la más importante del año por entonces, se vieron totalmente trastocadas, y hubo que esperar hasta finales de noviembre para saber que la autora del disparo había sido Kristin Shepard (Mary Crosby), amante y cuñada de J.R.