Meriton vuelve a hacer todo mal

Gabriel Paulista

Gabriel Paulista / EP

Pablo Leiva

Pablo Leiva

Con Paulista pasa lo de siempre con Meriton. Discutir que Paulista debía marcharse a final de temporada va a gustos. Incluso que hubiera empezado la temporada. De hecho, un servidor nunca fue excesivamente fan del central brasileño, quien tiene como su mejor etapa aquella en la que tenía a Garay arreglándole muchos de los problemas que generaba. Pero eso no quita para reconocer que este año estaba haciendo una temporada muy correcta en cuanto a rendimiento, profesional, con buen carácter y siempre dejándose todo en el campo.

Porque podremos discutir su verdadero nivel en los últimos años, pero su profesionalidad, salvo momentos puntuales, está fuera de duda. Y eso no lo puede discutir nadie. En cualquier caso, sí es un problema que Paulista empezara la temporada porque el Valencia era incapaz de firmar un buen central mientras se gastaba cinco millones de euros en Cenk. Por mucha milonga de los cómodos plazos que se contara en su momento.

En definitiva, si la directiva tenía claro que Paulista no debía llegar a los 20 partidos mejor una venta en verano con dinero por el medio que marcharse como ahora, sin ‘cash’ para el club y siendo uno de los pilares fundamentales de este equipo. En definitiva, Meriton llega tarde a una operación que la veía hasta cualquier persona que no supiera de fútbol o de finanzas. A partir de ahí, la mejor de las suertes para Gabriel Paulista, parte importante de la Copa del 2019.

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