El valenciano David Ferrer, que, después de una brillante carrera en la que llegó a ser número 3 del mundo, se retiró tras la pasada temporada, participó este miércoles en Kuwait en la inauguración de la Academia de su compatriota y amigo Rafa Nadal.

En una entrevista con la Agencia EFE que tuvo lugar en Kuwait durante la inauguración de la segunda 'Rafa Nadal Academy', la primera fuera de España; el alicantino, ganador de 27 torneos de la ATP, explica cómo es su nueva vida.

Uno se retira de la alta competición, pero nunca del tenis, ¿no?

No. Ni lo pienso hacer, porque ha sido toda mi vida. Es lo que siempre he hecho, lo que sé hacer y lo que más me gusta. Sigo vinculado, juego en séniors (veteranos), dirijo el torneo de Barcelona Open y bien, estoy feliz. Bien. Todo bien.

¿Es más complicado llevar el traje y la corbata que vestir ropa deportiva?

(ríe) Es diferente. Tampoco voy siempre con traje y corbata. Me voy cambiando. Me gusta estar en pistas y es diferente, porque cuando juegas a tenis estás concentrado en lo que haces; y lo haces cada día, es una rutina. Ahora es otra cosa. Y lo afronto todo de diferente manera.

Vino a Kuwait atendiendo a la llamada de un amigo que también fue su rival, ¿no?

Sí, sí. Amigo, amigo. Antes era mi rival, pero también era mi amigo. Estoy contento, porque nunca había estado en Kuwait, así que cuando me lo comentaron, no lo dudé ni un momento. Y sobre todo porque Rafa, al final, invierte en tenis, no sólo en España, que es muchísimo, sino a nivel global. Y eso es algo fundamental; y muy importante.

Son amigos, pero ¿nunca piensa en que hubiera ganado muchas cosas más, todavía, de no haberse cruzado Nadal en su camino?

(ríe) No, no. No pienso en eso, sinceramente. El tenis me ha dado muchas cosas, estoy muy contento con todo lo que he conseguido. estoy muy feliz así, nunca he pensado en mucho más. A mí Rafa me ha ayudado mucho, también, porque mejoré mucho mi tenis, porque tener a alguien tan bueno enfrente y en quién fijarte, hace que te esfuerces más y que quieras mejorar más en todo momento.

¿Qué triunfos o qué momentos de su carrera destacaría?

Han sido muchos. Pero quizás la Copa Davis, cuando ganamos en Sevilla. Te diría que 2013 acabe tercero del mundo; en 2012 gané siete torneos y mi primer Masters 1000, en París. No sabría decirte uno en concreto, pero he tenido años muy buenos; y siempre he sido muy regular. El tenis me ha hecho muy feliz.

¿Qué es lo que más echa de menos de su época de profesional; y qué es lo que más agradece de no tener que hacer, ahora?

Echo de menos las tertulias con mis compañeros; también los momentos de soledad. Ahora, con familia, tienes menos tiempo para ti mismo, porque lo principal es la familia. Y de lo que menos echo de menos es el viajar y la presión que tienes antes de los partidos. Ahora todo es mucho más relajado. Cuando dejas de jugar, te das cuenta de muchas cosas en las que antes ni pensabas y lo relativizas todo bastante más.

Sigue en forma; y, evidentemente, sigue jugando al tenis. Pero ahora ¿puede practicar más a menudo otros deportes? ¿Cuáles practica?

Juego al tenis, pero también al padel. Alguna vez juego al fútbol. Y, más a menudo, voy a 'pilates' con los amigos; pero para tomarme luego una cerveza con ellos, fundamentalmente (ríe). Sigo jugando al tenis, pero mucho menos: sólo dos o tres veces a la semana.

¿Y disfruta más ahora, jugando al tenis?

Sí. Antes también lo hacía, pero ahora no tengo ninguna presión.