El Alevín A ha acabado tercero en la XXII edición de la Liga Promises disputada en Villarreal. El Valencia se impuso a los locales 2 a 1 en la final de consolación. A pesar de no haber logrado el triunfo definitivo, el equipo que dirige Alfredo Ramos ha hecho un gran papel en el torneo donde participan las promesas de la liga española.
Tras una fase de grupos con dos victorias, un empate y una derrota, el Valencia llegó a las semifinales al superar por los penaltis a Español y Granada „en cuartos y octavos de final respectivamente„. Pero el alevín no pudo disputar la final porque cayó en las semifinales con el Sevilla, también desde la tanda de penalitis (6-5).
En la pelea por el tercer puesto con el Villarreal, los valencianos se adelantaron en el marcador en la primera mitad tras un gran cabezazo del delantero Andrés García. La alegría no duró mucho porque los castellonenses empataron en la siguiente jugada cuando Rodrigo Alonso cazó un balón rechazado, al que el meta Víctor Vicero no pudo responder. El Valencia salió muy enchufado en la segunda parte y, tras unos disparos desde fuera del área que se marcharon por poco, el centrocampista, Adrián Amaro, colocó el segundo en el marcado con otro gran cabezazo precedido de un centro desde la banda izquierda. El alevín supo sufrir el resto del encuentro y se mantuvo muy serio en defensa, sobre todo el capitán Rubén Iranzo, que fue un tormento para los atacantes del Villarreal.
Marc Talens, Jorge Sánchez y Alvaro Llopis no fueron convocados para disputar este torneo, pero han sido jugadores importantes a lo largo de la liga. El equipo les ha echado de menos.
Finalmente el Sevilla, después de vencer al Valencia por penaltis en semifinales, se proclamó campeón de la Liga Promises tras derrotar en la final al FC Barcelona por un marcador de 2 goles a 1.
