Tras consumar la cuarta temporada más triste de su historia, el Valencia se impone una revolución a efectos de composición de plantilla. Tal y como anunció Suso García Pitarch en la presentación de Pako Ayestaran, el equipo está abocado a una limpieza que permita regenerar el tejido competitivo y los valores de un ADN que se ha ido difuminando a golpe de despropósito de un tiempo a esta parte. Detectados los jugadores de impacto negativo en el ecosistema valencianista, el club ha señalado también sus nuevos iconos, los jugadores que deben liderar este proceso de reconstrucción para relanzar al equipo y devolver la fe al aficionado. Gayà, Alcácer y Santi Mina son los intocables: el alma del nuevo Valencia CF.
Los tres futbolistas se sometieron hace cuatro semanas a una sesión fotográfica en la que posaron con la camiseta que vestirá el conjunto de Mestalla la próxima temporada y que está previsto que vea la luz a principios del mes de julio. Era la primera toma de contacto que tenían con ella y es que Adidas, a diferencia de Joma „la anterior marca„, no sondea a los jugadores para conocer sus preferencias antes de confeccionar las prendas. La sesión se llevó a cabo con varios jugadores pero Gayà, Mina y Alcácer son cabeza de cartel por dos motivos. Uno, porque en el club existe la convicción de que, junto con Jaume Domènech, son los tres futbolistas que representan mejor la ilusión, la ambición y el orgullo de pertenencia que debe tener un jugador del Valencia. Dos, porque son de los pocos de la plantilla que tienen claro su futuro en Mestalla.
Ninguno de los tres está en el mercado y eso, con el panorma actual, roza lo extraordinario. Gayà, Alcácer y Mina son la apuesta ganadora del club a corto, medio y largo plazo. Por ello, llegado el momento de lanzar la campaña de renovación de abonos, en el club se decidió echar mano de esas mismas fotografías, si bien oscureciendo a los jugadores desde la barbilla hasta los hombros para no desvelar el aspecto de la nueva elástica. ¿Por qué no André Probablemente sean los jugadores con mejor cartel internacional... o quizá Parejo... o Negredo, que hasta mediados de la pasada temporada era la imagen icónica en las iniciativas de mercadotecnia del club. Detrás de esa decisión se esconde un criterio anclado en la estrategia deportiva de un Valencia con ánimo de reconstrucción y que busca jugadores creíbles y con capacidad para representar al aficionado.
Gayà tenía billete a Singapur
Al finalizar la temporada, el club tomó la decisión de recalibrar los roles. El día a día vivirá una transformación tras las vacaciones. Suso y Ayestaran van a prescindir de algunos jugadores que no encajan en su vestuario y el viaje a Singapur, más allá de cumplir con los eventos oficiales, sirvió para que los futbolistas interiorizaran todos los matices del proyecto y conociesen las aspiraciones y la manera de trabajar del propietario, algo que, esperan, tenga un efecto positivo en la plantilla. Los que viajaron no lo hicieron por casualidad. Y los tres estaban en el plan inicial, si bien Gayà no viajó finalmente porque hubiese supuesto un retraso en su recuperación. Estaba previsto que acudiese junto a Alcácer, Mina, Jaume, Fuego y Ryan. Tanto es así que tenía billete para poner rumbo a Singapur. El club ´limpiará´ el vestuario y ellos tienen la misión de hacerse fuertes para inculcar compromiso y orgullo de pertenencia.
