Las palabras de Anil Murthy confirman el cambio del discurso del Valencia. Desde el club ya no se habla de reestructuración de la plantilla y sí de los ajustes a los que habrá que someterse por las limitaciones del Fair Play Financiero y la falta de ingresos por llevar dos temporadas sin competir en competiciones Europeas. Escuchando las primeras declaraciones oficiales de Anil como nuevo presidente del club queda claro que no habrán cambios profundos este verano y que la inversión para reconstruir el equipo está muy lejana. «Debemos hacer grandes ajustes y no será fácil». Algo que choca con las peticiones de Marcelino García Toral. El entrenador del Valencia ha reconocido a su llegada de la reunión con Peter Lim en Singapur todo lo contrario». Si el Valencia ha quedado el 12 y queremos reestructurar la plantilla, para traer buenos futbolistas hay que realizar una inversión», decía el pasado 23 de junio en Onda Cero. Días después, el 26, en Tribuna Deportiva de Radio Sport se mostraba todavía más contundente. «Quiero estar arriba y creemos que para ello hay que hacer un cambio amplio en la plantilla. Varios colegas han sido incapaces de sacar buenos resultados y la conclusión es cambiar la plantilla».

Marcelino asegura que no se siente engañado y repite insistentemente que no se siente nervioso. Al menos eso es lo que decía antes de escuchar el primer mensaje de Anil como presidente. «No hemos estado en competición europea durante dos años y nuestros ingresos se han visto afectados de forma grave. Debemos hacer ajustes grandes y no será fácil. Los clubes tenemos que trabajar dentro de las limitaciones y restricciones que tenemos. El Fair Play Financiero es una norma que no podemos incumplir, no es una decisión de poner más dinero si no de adaptarnos a unas normas y de cumplirlas». Las palabras de Anil van en las misma dirección que los últimos movimientos del club en el mercado. No hay liquidez. El club desconocía que el pasado viernes expiraba la cláusula de seis millones de euros para fichar a Raúl Albiol. En sus planes estaba pagarlos más adelante. La realidad es que cuando quisieron reaccionar a tiempo era imposible reunir tanto dinero. Algo parecido sucede con Neto. El Valencia negocia a la baja con la Juventus y no llega a los seis millones que piden por el portero brasileño.

El Valencia no divisa inversión ni cambios profundos a la vista y, sin embargo, por la cabeza de Marcelino sigue pasando una reconstrucción de la plantilla. De momento, ha conseguido que el ya jugador de River Plate Enzo Pérez no comience la pretemporada. Sin embargo, todavía tiene dos patatas calientes en el vestuario como Diego Alves. Pero Marcelino va mucho más allá. Tal y como publicaba este sábado SUPER lo que necesita el técnico asturiano para hacer un Valencia competitivo es el fichaje de un portero, ters centrales, dos mediocentros y un futbolista de ataque preferiblemente de banda izquierda. Parece imposible después de escuchar a Anil y de saber que la nueva estrategia de Lim pasa por obligar a Marcelino a sacar rendimiento de la actual plantulla con el objetivo de revalorizarla de cara a la próxima temporada. Algo falla.

Mientras tanto se planifica, según Murthy, «de forma temprana, con rigor y paciencia». «Alemany y Alexanko, de modo consensuado con el entrenador Marcelino, están trabajando incansablemente para mejorar la plantilla y su rendimiento», dice. Del resto del primer discurso de Anil poco nuevo. El presidente se marca, como él dice, dos objetivos: subir en la clasificación y construir una estructura estable. «Hoy el club debe centrarse en lo fundamental para volver al buen camino: en primer lugar, subir en la clasificación. En las dos últimas temporadas, no hemos rendido bien pero confío en que volveremos. En segundo lugar, debemos construir una estructura de club que funcione y que sea sostenible. Los clubes que solo miran el corto plazo acaban pasándolo mal, hay muchos ejemplos en el fútbol».